Fin del trayecto. El Estado ha culminado su regreso al capital de Telefónica tras alcanzar el umbral del 10% del capital, así como indicó el mandato del Consejo de Ministros del pasado 19 de diciembre.

La Sociedad Estatal de Participaciones Industriales (SEPI), organismo a través del que se ha articulado la operación, ha comunicado este lunes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) la posición, lograda tras una inversión aproximada de 2.300 millones de euros.

Respuesta a Arabia Saudí

Antes de alcanzar esta cifra, el organismo dependiente del Ministerio de Hacienda ya ha designado un representante en el consejo, en la persona de Carlos Ocaña Orbis, cuyo nombramiento fue aprobado el pasado 8 de mayo, en sustitución de la vocal independiente Carmen García de Andrés

La maniobra responde a la decisión del Gobierno de responder a la entrada de la ‘teleco’ pública saudí STC en el capital, anunciada el pasado septiembre cuando, por sorpresa, declaró haberse hecho con el 9,9% de la operadora española

El presidente Pedro Sánchez en una entrevista en La Sexta

El Ejecutivo ha justificado la vuelta del Estado al capital de Telefónica, más de un cuarto de siglo después de culminar su privatización, en la conveniencia de dar estabilidad accionarial a una empresa considerada como estrtatégica por su papel de contratista de referencia en sectores críticos como Defensa, telecomunicaciones y ciberseguridad.

De esta forma, el Estado se afianza como primer accionista de la compañía, toda vez que STC tan sólo cuenta de forma efectiva con el 4,9% del capital, dado que precisa de la autorización del Consejo de Ministros para traspasar el umbral del 5%. El resto de los títulos hasta el 9,9% los mantiene a través de instrumentos derivados.

Por delante de La Caixa

Tras la SEPI se sitúa el entorno de La Caixa, con el 7,5% que suman Criteria, su holding inversor, y Caixabank, su principal participación, del que controla en torno a un 32%. 

Criteria también ha respondido a todos estos movimientos en el capital de la operadora, al duplicar la participación que tenía hasta el primer trimestre de este año y situarla en el actual 5%. 

BBVA y Blackrock, con sendos paquetes de algo más del 5% también figuran por delante de STC a la espera de que la compañía de Oriente Medio pueda hacer efectiva su inversión.

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