BBVA ha confirmado que intentará de nuevo fusionarse con Banco Sabadell. El presidente del banco de Madrid, Carlos Torres, ha trasladado a su homólogo catalán, Josep Oliu, el "interés del consejo de administración de BBVA en iniciar negociaciones para explorar una posible fusión entre ambas".
Este ha sido el escueto mensaje remitido a los accionistas, seguido de una breve nota de la entidad con sede en Alicante en la que da acuse de recibo de una propuesta escrita de fusión, recibida "a las 13:43 horas del día de hoy", según indica con precisión milimétrica. "El consejo de administración de Banco Sabadell analizará adecuadamente todos los aspectos de la propuesta", añade a continuación, para finalizar un breve comunicado de información privilegiada a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Buenos resultados trimestrales
La maniobra reabre el baile entre entidades financieras en España. Y lo hace en un momento dulce para ambos grupos financeros, ya que tres años después del inicio de las primeras conversaciones para este fin, los dos bancos han sido de los valores más revalorizados en el Ibex 35. Han multiplicado por tres su capitalización agregada y han dejado atrás los momentos más complicados en el parqué.
De hecho, los analistas daban por descontada la operación. En el último trieno se han despejado los interrogantes sobre la supervivencia de ambos grupos en un sector con cada vez menos actores en Europa. Ahora, tanto Banco Sabadell como BBVA son grupos financieros solventes y fuertes con una cartera de clientes sólida, tal y como ha quedado claro en la última presentación de resultados.
El Sabadell cerró marzo con una cifra de benficios tan redonda como los 500 millones de euros. El resultado superó en un 50,4% el obtenido en el mismo periodo de 2023, tras ganar 308 millones; y situó su rentabilidad sobre activos tangibles (ROTE) por encima del 12%. Es decir, en una línea ascendente que fue premiada en el parqué. La revalorización en el mismo día en que daba a conocer sus números alcanzó el 10%.
En cuanto a BBVA, su beneficio trimestral subía el 19% hasta los 2.200 millones. Se basó de nuevo en las alzas a doble dígito del margen de intereses (+25%) y de la intensa actividad comercial (+9,5% del crédito a clientes), que compensaron efectos negativos como el impuesto a la banca y el tipo de cambio.
Fracaso en la operación de 2020
La primera ocasión en la que BBVA intentó hacerse con el control de Banco Sabadell culminó con un fracaso abrupto. Fue en noviembre de 2020 y las conversaciones duraron tan sólo 10 días. No hubo consenso ni siquiera en aclarar los motivos de la ruptura del proceso, que planteaba demasiadas incógnitas abiertas. Las mismas que se repiten en la actualidad, ahora con dos entidades más fuertes.
De nuevo fue BBVA el que dio el pimer paso. La respuesta de Banco Sabadell no fue precisamente entusiasta. Declinó diluirse en el grupo de Torres y consideró que ya disponía del músculo suficiente par continuar sólo, ya que en todo momento se planteó la fusión como una ascripción del grupo con sede en Alicante a la firma de Madrid.
Entusiasmo limitado del Sabadell
El sentido de la operación era el simple tamaño de la entidad resultante, pero tanto las redundancias como la solapación de los negocios, las ofertas y las dudas sobre la sede y los equipos se llevaron por delante las intenciones de BBVA.
Ahora, lo intentan de nuevo con la misma respuesta tibia por parte de los receptores de una oferta que se debe concretar. "El consejo de administración de Banco Sabadell analizará adecuadamente todos los aspectos de la propuesta", ha indicado el banco presidido por Josep Oliu en otra nota escueta remitida a posteriori a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
Reacción en bolsa
Cabe recordar que en el primer intento de llevar a buen puerto la operación los títulos del Sabadell cotizaban a unos 0,30 céntimos. Ahora, se mueven alrededor de los 1,8 euors. Sacar la operación del cajón implicará que BBVA se tenga que rascar más el bolsillo.
La primera reacción del anuncio ha tenido lugar en el parqué. Las acciones de Banco Sabadell han rebotado por encima del 7% tras el anuncio de que BBVA la quiere integrar. En cuanto al comprador, su cotización ha seguido en rojo; el mismo color que domina el selectivo español en la jornada de este martes.