La Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) ya cuenta con la información que ha requerido a Grifols acerca del contenido del informe publicado por Gotham City Research el pasado 9 de enero y que ha provocado el desplome de su cotización al poner bajo sospecha determinadas operaciones y parámetros contables.
Este martes finaliza el plazo para que la compañía responda a los requerimientos del supervisor que, no obstante, ha aclarado en una nota que los resultados de este proceso de consulta no se conocerán de forma inmediata dado que requieren del correspondiente análisis por su parte.
El fondo, bajo la lupa
"Dicho análisis puede requerir que se recaben informaciones aclaratorias o complementarias y, dada la complejidad de las cuestiones sobre las que versa, puede demorarse unas semanas sin poder determinar una fecha concreta para su conclusión", señala el organismo que preside Rodrigo Buenaventura.
Además, la CNMV añade que también estudia el contenido del documento publicado por Gotham a fin de poder verificar la verosimilitud de las informaciones en él vertidas y posibles conexiones con operaciones que se realizaron aquellos días en el mercado.
Operativa habitual
En particular, el supervisor se encargará de determinar si el fondo ha actuado en contra de las normas europeas de abuso de mercado en lo concerniente a la difusión de información engañosa. Esta labor será realizada conjuntamente con el análisis de las respuestas de Grifols.
En cualquier caso, la CNMV también aclara que no ha detectado filtración alguna de información privilegiada que dé pie a una actuación por su parte. En términos similares se pronuncia sobre la operativa en corto, que considera que en el caso de Grifols no ha excedido de los parámetros medios que presentan las cotizadas en el mercado español y que "no ha determinado la evolución fundamental del precio del valor".
Es habitual que en este tipo de procedimientos se produzca un intercambio de documentación entre el emisor y el supervisor, con el fin de que cuando se proceda a publicar las respuestas a los requerimientos éstas sean lo más completas posibles y no den lugar a nuevas dudas en el mercado.
"La CNMV no hace pública la primera respuesta que recibe del supervisado al que solicita información sobre un aspecto determinado. Tras un primer análisis es frecuente que reclame contenido adicional o que el emisor ahonde en algunos puntos que, a su juicio, no quedan suficientemente claros", apunta una fuente próxima al organismo.
En función del detalle
A diferencia de este caso, en la mayoría no trasciende el requerimiento de la CNMV, con lo que el primer impacto que recibe el inversor es la respuesta final que aparece en los registros del supervisor.
De este modo, a partir de ahora el mercado deberá esperar unos días para conocer esa respuesta definitiva, que podrá demorarse más o menos en función de cómo de completo y detallado haya sido el primer documento que le ha remitido Grifols.
Dimensión mediática
"El plazo de semanas que ha dado la CNMV, aunque inconcreto, parece prudente con lo que ocurre en este tipo de procesos. Lo más probable es que haya incluso respuestas intermedias de las que el mercado no tenga noticia hasta que se dé un visto bueno final".
La única diferencia con este caso es la dimensión mediática que ha cobrado, tanto por ser un valor del Ibex 35 el afectado como por la magnitud de la caída en bolsa y por la peculiaridad del fondo que ha emitido el informe contra la gestión de la empresa.
Lenta recuperación
Tras conocerse la nota del supervisor, las acciones de Grifols han mantenido el tono positivo que han mostrado durante la sesión, con subidas superiores al 2%, que se unen a las cosechadas en las últimas jornadas y que le han llevado a recuperar una pequeña parte del terreno perdido tras desatarse la tormenta en torno al informe de Gotham.
No obstante, Grifols acumula un retroceso del entorno del 36% desde el cierre previo a la publicación de este documento.
Noticias relacionadas
- La CNMV pide al socio de Grifols participado por la familia detalles sobre sus socios y cuentas
- Tomás Dagà, la mano derecha de los Grífols al que señalan como origen de la polémica con la gestión
- Grífols se deja otro 5,7% esta semana y acumula una caída del 46% en lo que va de año
- Tomás Dagà lideró desde Osborne Clarke operaciones de Grífols valoradas en 4.300 millones