Nueva sesión de turbulencias para las acciones de Grifols. La farmacéutica retrocede en torno a un 6% tras poco menos de dos horas de contratación en la sesión de este jueves, en la que la compañía tiene previsto celebrar una reunión con inversores para tratar de aclarar las dudas en torno a las cuentas y operaciones de la empresa generadas el pasado martes por el informe de Gotham.
Después de la notable reacción alcista del miércoles, que cerró con subidas del 12%, y un arranque plano este jueves, las ventas han vuelto a imponerse en un valor que sigue bajo el influjo de los ataques especulativos y operaciones a corto.
Volumen disparado
Una vez más, Grifols registra un anómalo volumen de contratación, que ya se aproxima a los dos millones de títulos negociados mucho antes de llegar a la media sesión, lo que prácticamente iguala la media diaria de los tres últimos meses.
Este miércoles, la compañía fundada por la familia que le da nombre, y que se mantiene como primer accionista, emitió una nota en la que respaldaba plenamente la labor del consejo de administración, encargado de validar y firmar las cuentas que Gotham ha puesto en entredicho, y en particular a su presidente y consejero delegado, Thomas Glanzmann, que acumula 17 años en el órgano de gobierno del productor de hemoderivados.
Contraste con el Ibex
A la espera del citado encuentro con los inversores, los títulos de Grifols luchan por aguantar por encima de la cota de 11 euros, con lo que acumulan un retroceso de algo más del 22% respecto al cierre del lunes, el último antes de que se hiciera público el documento del fondo bajista.
Una vez más, el tono de Grifols contrasta con el del mercado, toda vez que el Ibex 35 transita hacia la media sesión con alzas moderadas, impulsado por el sector energético, tras un mal inicio de 2024 en el parquet, y la banca, que está mostrando la cara opuesta en el ejercicio que acaba de comenzar.