El BCE alivia la presión sobre la prima de riesgo española
El diferencial con el bono alemán baja de 100 puntos por vez primera desde abril mientras el endeudamiento público supera la cota histórica de 1,5 billones de euros
18 noviembre, 2022 00:00El mecanismo puesto en marcha por el Banco Central Europeo (BCE) cuando comenzó la subida de los tipos de interés está minimizando los efectos del imparable incremento de la deuda pública española, que volvió a alcanzar máximos históricos en octubre, por encima de 1,5 billones de euros. Sin embargo, la actuación del emisor en los mercados de renta fija ha llevado a la prima de riesgo por debajo de 100 puntos básicos, algo que no sucedía desde el pasado mes de abril.
La rebaja del diferencial con el rendimiento del bono alemán de referencia ha llegado de la mano de un incremento del precio de los bonos españoles, que ha hecho descender su rentabilidad por debajo del 3% en el mercado secundario, lo que supondrá un cierto alivio en las próximas emisiones por parte del Tesoro Público.
Precisamente, la última vez que la prima de riesgo se situó por debajo de los 100 puntos, el BCE aun no había iniciado el ciclo de subidas del precio oficial del dinero, que le llevó a activar el mecanismo que pretende paliar el impacto negativo de estas revisiones en el rendimiento de los bonos de los países más endeudados.
Aunque no se trata de una actuación en el mercado tan agresiva como los planes de estímulo, que se dieron por acabados antes del verano, sí persigue el efecto de que los bonos de países como Italia y España no vean demasiado elevado su rendimiento y haga la refinanciación de estos estados demasiado costosa por el impacto de las subidas de tipos.
Nuevo récord histórico
De hecho, la medida también ha tenido su reflejo en el bono italiano, cuyo diferencial respecto al alemán se ha situado por debajo de los 200 puntos básicos, un hito que también había logrado por última vez antes del inicio de la subida de tipos.
No obstante, el recorte de las primas no oculta el grave problema que supone un nuevo incremento de la cifra absoluta de la deuda del conjunto de las administraciones públicas, hasta 1,504 billones de euros, de acuerdo con las últimas cifras publicadas por el Banco de España.
Fuera del objetivo de Moncloa
La cifra supone un 116% del PIB de los últimos doce meses, un guarismo que se sitúa un punto por encima del objetivo que estableció el Gobierno para el conjunto del año.
Los datos sitúan la deuda per cápita en el entorno de los 32.000 euros, que también supone alcanzar máximos de todos los tiempos.
En diversas comparecencias públicas, algunas de ellas en sede parlamentaria, el gobernador del Banco de España, Pablo Hernández de Cos, ha alertado sobre la evolución de esta variable y los peligros que comporta para la economía española, en especial a la hora de acudir a los mercados con el fin de refinanciarse.
En este sentido, el gobernador ha hecho alusión a la acuciante necesidad por parte del Gobierno de proceder a trazar una senda de consolidación fiscal con vistas a moderar el endeudamiento público, principalmente a través de la reducción del gasto público.
Mensaje de la Airef
Un mensaje que también ha repetido con insistencia la Autoridad de Responsabilidad Fiscal Independiente (Airef), que ya al inicio de la pandemia pronosticó que España podría tardar más de dos décadas en rebajar la deuda a menos del 100% del PIB en términos relativos si no se llevaba a cabo un ajuste intensivo durante los próximos años.
Lejos de estas líneas de actuación, los presupuestos elaborados por el Gobierno y aprobados por el Parlamento durante los últimos ejercicios han consolidado una tendencia ascendente en el gasto público que, en consonancia con la deuda, ha marcado sucesivos máximos de todos los tiempos.
Presupuestos expansivos
Las tensiones en los mercados de renta fija podrían volver cuando el BCE rebaje el ritmo de subida de tipos, conforme la escalada de la inflación se modere y se aproxime al objetivo del emisor, fijado en el 2%.
Será entonces cuando deje de aplicar el mecanismo actual para evitar una crisis de deuda pero con el precio oficial del dinero en la zona euro en niveles más elevados (3% o superior), a partir del que los expertos pronostican problemas para los más endeudados.