La Cámara de Comercio de Barcelona aprobará, salvo sorpresas de última hora, un manifiesto en el que hace un llamamiento a que las empresas “incorporen el catalán como lengua de uso habitual en sus relaciones internas, así como con los proveedores y los clientes” en el pleno que tendrá lugar este miércoles. El documento, al que ha tenido acceso Crónica Global, tilda de “necesario” que las compañías conviertan el “catalán en un vehículo de aproximación al territorio donde ejercen su actividad”.
Asimismo, considera capital que la Administración impulse “acciones de apoyo a la lengua catalana en la actividad empresarial, favoreciendo su uso por parte de todo el colectivo que trabaja e interactúa” con el sector económico autonómico.
Liderazgo de la ANC
El equipo de gobierno encabezado por Mònica Roca, candidata de Eines de País (la lista de la ANC), muestra su “preocupación” por la “deriva de la situación actual y las consecuencias que puede tener para la lengua propia”, y demanda una “toma de consciencia de esta situación por parte de la sociedad, en especial por parte del mundo empresarial, que también se debería sentir interpelado por esta preocupante situación de retroceso”.
Habla de un “enérgico rechazo” a las “actuaciones que suponen un ataque al uso del catalán como lengua propia de Cataluña y a su función de instrumento de cohesión y de integración social”.
Presentación de la candidatura Eines de País a las cámaras de comercio catalanas, con Joan Canadell (c) y Mònica Roca (2i) / EUROPA PRESS
Interpelación al resto de entidades empresariales
Por todo ello, la organización de dinamización empresarial se compromete a “impulsar el uso del catalán” en el tejido económico local y afirma que “pondrá a disposición las herramientas que contribuyan a cubrir carencias que puedan tener” las compañías. Como, por ejemplo, facilitar “documentos, contratos y plantillas que difícilmente se pueden encontrar en catalán”.
Asimismo, señala que elevará el manifiesto al Consejo General de Cámaras de Comercio de Cataluña para intentarlo aprobar en el resto de organizaciones del territorio --cuestión más compleja, ya que los independentistas no tienen la mayoría en las 12 organizaciones restantes, aunque controlan el órgano decano--. También lo llevarán al resto de “asociaciones y entidades de representación empresarial” para que lo aprueben y “lleven a cabo en sus respectivos ámbitos de actuación las acciones necesarias para hacer del catalán la lengua de uso habitual de las empresas”.
El catalán, lengua única de la Cámara
Los independentistas que controlan la Cámara de Comercio de Barcelona anunciarán en el plenario un cambio en el reglamento de régimen interno de la organización. Determinarán que el catalán se usará como lengua en sus “actuaciones y documentación" del día a día, así como en la "relación con las Administraciones y el resto de corporaciones públicas de Cataluña, las instituciones y las empresas que dependen de ella”.
Será la lengua habitual en las “rotulaciones y las comunicaciones y notificaciones dirigidas a personas físicas o jurídicas residentes en el ámbito lingüístico catalán”.
Ley catalana de cámaras de comercio
Eines de País avanza en el mismo documento que la “ley de cámaras oficiales de comercio, industria, servicios y navegación de Cataluña dispone que en el marco de sus funciones y acciones instrumentales será función de las cámaras fomentar la normalización lingüística en el ámbito del comercio, la industria y navegación”. Cabe recordar que esta norma aún ni está en debate en el Parlament.
Joan Canadell y el expresidente de la Generalitat, Quim Torra / EUROPA PRESS
El predecesor en el cargo de Roca, el ahora diputado de JxCat Joan Canadell, la debatió con Quim Torra cuando este era el presidente catalán. La entonces consejera de Empresa, Àngels Chacón, la vetó por el intento de poner en el mismo rango las cámaras de comercio, corporaciones de derecho público, con las patronales más representativas de Cataluña. Hecho que generó el rechazo unánime de Foment del Treball y Pimec, pero también de UGT y CCOO. Aún no se ha abordado en la nueva legislatura.
Blindaje a la inmersión
Finalmente, el manifiesto de la Cámara de Comercio de Barcelona a favor y en defensa del catalán servirá también para rechazar la decisión del Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) avalada por el Supremo de que al menos el 25% de las clases que se den en el territorio sean en castellano y para blindar la inmersión.
Eines de País tiene la mayoría del pleno, por lo que podrá sacar adelante la aprobación de un documento en el que asegura que debe actuar “ante los ataques que sufre el uso de la lengua catalana en los ámbitos educativos, sociales, económicos y empresariales”. Todo ello, la misma semana en que la justicia ha dejado en el aire esta posición de control en el órgano directivo al anular la elección de seis sillas al constatar que se vulneró el derecho fundamental de igualdad de los electores al anularse votos del recuento sin una justificación correcta. La Generalitat presentará recurso a la sentencia y la actual dirección indica que la sentencia en firme no llegará hasta que deba convocar de nuevo elecciones en el organismo de derecho público. Por ahora, puede sacar adelante sus iniciativas políticas en la entidad empresarial.