Frente municipal contra el enésimo plan urbanístico del vertedero de Vacamorta
La Consejería de Territorio propone trasladar a 25 metros de distancia la instalación construida por los socios de Jordi Pujol Ferrusola
26 mayo, 2021 00:00La última propuesta de la Consejería de Territorio para restaurar el vertedero de Vacamorta ha agravado aún más el conflicto en este enclave del Empordà. El director general de la Agencia de Residuos, Josep Maria Tost, ha sugerido a los municipios implicados y las asociaciones ciudadanas que los tres millones de residuos contenidos en el recinto se trasladen a 25 metros de su actual emplazamiento.
Una propuesta que ha enervado al mundo local. Desde que la justicia resolvió en 2014 el cierre definitivo del basurero, gestionado desde el año 2000 por Gustavo Buesa y Josep Mayola --exsocios de Jordi Pujol Ferrusola--, la Generalitat ha eludido sus deberes. El último movimiento, según las fuentes consultadas, solo pospone de nuevo la retirada efectiva de los residuos.
Tres alternativas
El gestor se basa en un estudio encargado a Vilaseca Consultors que, tras descartar 241 espacios donde movilizar los restos, se decanta por dos terrenos arcillosos limítrofes con las instalaciones: Camp Calís, situado en la localidad de Cruïlles, i Elena, en Corçà.
Los motivos: los requisitos óptimos a nivel ambiental y la proximidad con el depósito de Vacamorta. El informe abre la puerta a la alternativa de llevar los deshechos hasta Peralada (Girona), algo que tampoco ha gustado a las autoridades locales.
Petición de ejecución de sentencia
Tost, que funge como responsable de la operación de vaciado, anunció el plan a los ayuntamientos y vecinos el pasado viernes. La reacción de rechazo fue unánime. Dani Encinas, alcalde de Cruïlles, Monells i Sant Sadurní de l'Heura (Girona), tilda de "broma de mal gusto" y "tomadura de pelo" la idea. El resto de localidades de la comarca también han expresado su malestar por esta decisión.
De hecho, Encinas ha avanzado a Crónica Global que esta semana los servicios jurídicos del consistorio reclamarán al Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) la ejecución de las resoluciones que obligan al gobierno autonómico a proceder a la restauración del paraje. "La posibilidad de construir otro vertedero en el mismo término municipal sería un incumplimiento y reiteraría la misma degradación si se ubican en otras zonas de arcilla", resume.
Malestar vecinal
Las entidades vecinales y ecologistas que a lo largo de 20 años han pleiteado para eliminar el depósito también desestiman la iniciativa. Montse Tena (Plataforma Alternativa a l'Abocador de Cruïlles) explica a este medio que Tost llegó a afirmar durante el encuentro que eran "ironías de la vida" que el nuevo vertedero terminase justo al lado del anterior. "Se trata una propuesta vengativa. Deben de pensar aquello de si no quieres una taza, toma dos", resume.
La misma sensación cunde en CEPA (Centre d'Ecologia i Projectes Alternatius). Una de sus miembros, Mercè Girona, califica de "provocación" y "menosprecio" que se pretendan reubicar los restos de Vacamorta --las instalaciones contienen residuos inertes y otros de tipo industrial no especial-- en unas hectáreas tan cercanas al núcleo poblacional. Máxime cuando las sentencias que ordenaron en dos ocasiones la clausura del recinto tomaron precisamente esta proximidad como el argumento fundamental para decretar el cierre de Vacamorta.
Incumplimientos
Las organizaciones también denuncian, tal y como publicó Crónica Global, la pretensión del Departamento de retrotraer la extracción solo hasta 2003. Ello pese a que una interlocutoria firme del TSJC conminó en 2017 a la Administración a devolver el paraje al estado previo al inicio de cualquier actividad económica. "No puede desconocerse el mandato de ejecución del pronunciamiento que anuló la licencia municipal de actividad del año 2000, de modo que en forma alguna puede pretenderse, como se hace, que en ningún caso cabrá ir más allá de la devolución del paraje a su estado al otorgamiento de la autorización ambiental del 2003", remarcan las organizaciones.
Los afectados reprochan que no se haya puesto ninguna fecha sobre la mesa para empezar las obras de retirada. E incluso cuestionan la idoneidad de las zonas adelantadas por Tost desde un punto de vista técnico, ya que tanto Camp Calís como Elena son depósitos aluviales no cimentados con gran permeabilidad, lo que podría perjudicar el subsuelo.
Conflicto con Peralada
El plan de Territorio ha abierto otro conflicto, en este caso con Peralada. Su alcalde, Pere Torrent, declara a este medio que se ha enterado "a través de la prensa" de que el pueblo está en la terna para acoger los residuos de Vacamorta. "La opinión que puedo dar es a ciegas, ya que la consejería no nos ha comunicado nada. Pero la propuesta pinta mal ya que se ubicaría sobre el acuífero más importante del Alt Empordà que alimenta de agua a los municipios desde La Jonquera hasta Pau", cuenta.
El representante se siente "decepcionado" por que no se les haya consultado en ningún momento. Además, detalla que el probable destino, una explotación conocida como Los Hermanos, está actualmente en funcionamiento, por lo que no podría asumir los residuos. Por el momento, el intento del Govern por esquivar sus responsabilidades con Vacamorta ha chocado con un sólido frente local y vecinal.