Empresarios y sindicatos se agarran a la capacidad de diálogo de Artadi
La vicepresidenta económica concita esperanzas entre los interlocutores sociales, que exigen al Govern que esta vez “actúe coordinado y sin trabas internas”
18 mayo, 2021 00:00Algo de esperanza, no excesiva, pero se quiere creer que esta vez será diferente. Los interlocutores sociales, sindicatos y patronales, se agarran a la capacidad de diálogo de Elsa Artadi, llamada a ocupar la vicepresidencia de la Generalitat y responsable del área económica del Govern que presidirá el republicano Pere Aragonès. “Escucha, es receptiva, y conoce las interioridades de la Administración, eso no garantiza nada, pero es un primer paso”, señalan fuentes de la parte social. Se trata de una impresión que también comparten los empresarios, que reclaman, en cualquier caso, que la prioridad debe ser “la cohesión interna, una voz con la que se pueda identificar a todo el Govern desde el ámbito económico”.
Las ejecutivas de Foment del Trebal y de Pimec, y las cúpulas de CCOO y UGT en Cataluña, consultadas por Crónica Global, sostienen que Artadi, de entrada, es un buen perfil. Y destacan --y es compartido-- que es una buena idea unir Empresa y Treball que, en ese caso, dirigirá un o una responsable de ERC.
¿Qué margen tiene la CUP?
Camil Ros, secretario general de UGT, señala, en todo caso, que para llegar al acuerdo de este lunes “tanto Junts como ERC podían haberlo hecho mucho antes”. Es decir, los interlocutores sociales no muestran una gran sorpresa por cómo se ha alcanzado ese pacto. Lo que causa extrañeza es que Esquerra no viera, desde el primer momento, que no podía exigir condiciones a Junts per Catalunya cuando no había logrado, de forma clara, la hegemonía del independentismo tras las elecciones del 14F, y no tenía un plan alternativo.
Pimec insiste en que lo que debe prevalecer “es la cohesión interna y la gestión, con transparencia, de los fondos europeos, contando con todos los agentes económicos y sociales”. Es la misma línea que defiende Foment del Treball, que pide “centrarse únicamente en la reconstrucción económica”, como señala Josep Sánchez Llibre. La figura para que ese propósito pueda ser posible, la de Artadi, causa una buena impresión, pero se generan dudas. “¿Hasta qué punto el Govern de Aragonès y la propia Artadi no estarán sujetos a los acuerdos suscritos con la CUP?”, preguntan.
Marcar las prioridades del Govern
Esas dudas que llegan desde Foment no cobran tanta importancia desde las fuerzas sindicales. Para Javier Pacheco, secretario general de CCOO que esta semana opta a la reelección, lo importante es ese departamento de Empresa y Treball, y la propia capacidad de la futura vicepresidenta, al frente de Economía, para coordinar lo que se reclame desde el mundo del trabajo. Todo eso se debería concretar en la elaboración de los próximos presupuestos. “Es en ese momento cuando el nuevo Govern deberá marcar prioridades”, señala, para comprobar si el acento de Artadi se traduce en su apuesta más liberal o está acorde con los tiempos “que reclama la postpandemia”.
Sin embargo, de la figura de la futura número dos del Ejecutivo catalán, que colaboró con Andreu Mas-Colell en el departamento de Economía bajo la presidencia de Artur Mas, se destaca la experiencia de gestión y los colaboradores que ha tenido a su lado. Como Josep Rius, que fue el hombre de confianza de Joaquim Forn en el Ayuntamiento de Barcelona y trabajó como jefe de gabinete del expresidente Carles Puigdemont.
¿La tradición de Convergència?
¿Se trata de una mayor confianza en los cargos que provienten de la antigua Convergència? “Sí y no, es cierto que tienen una mayor sensibilidad por las cuestines económicas y empresariales, pero en Junts per Catalunya conviven muchas almas, y no se sabe cuál de ellas se impondrá en el nuevo Govern”, argumentan fuentes patronales. La música suena mejor, además, porque Artadi centralizará el área económica, lo que incluye la gestión de los fondos europeos Next Generation, que se consideran clave para que la economía catalana pueda dar un salto en los próximos años.
Es lo que más destacan los interlocutores sociales y económicos. “Lo principal, esta vez, es que haya un Govern, que no vuelvan a lo de antes, que colaboren y nos escuchen”, aseguran los representantes sindicales. Camil Ros, añade que “estemos en contra o a favor, lo realmente indispensable es que haya ese Govern, para poderlo tener como interlocutor”. Eso hace referencia a los planes industriales, a la reactivación económica y a todos los planes que se encuentran parados, como los proyectos de energía eólica, entre otros.
Canadell, fuera de la lista
Las entidades económicas habían mantenido una gran conexión con Aragonès en su etapa de consejero de Economía. Tanto Foment como Pimec destacaban su empatía y su respeto y apoyo al tejido económico. El problema llegaba después, cuando las buenas palabras no se traducían en planes concretos en el seno de un Ejecutivo roto y con dos socios enfrentados. Ahora eso “debería cambiar por completo y si la responsable es Artadi, será bueno que demuestre que es capaz de actuar en nombre del todo el Govern ya en las primeras semanas”, insisten fuentes empresariales.
Esperar, sin grandes expectativas, pero con algo más de confianza. Agarrados todos a esa capacidad de diálogo que habría demostrado Elsa Artadi, bien vista, además, por los republicanos, que no querían en ningún caso que Junts per Catalunya hubiera apostado por nombres como el de Joan Canadell, expresidente de la Cámara de Comercio de Barcelona, uno de los derrotados tras el acuerdo alcanzado este lunes entre los posconvergentes y Esquerra.