La 'constelación Pacheco': quién construye la futura CCOO

La lista, que ha recabado más de 10.500 avales, incorpora rostros nuevos a la vez que se apoya en cargos de peso en el seno de la organización. Una mezcla de continuidad y reforma más que paritaria --la candidatura cuenta con cinco hombres y siete mujeres-- que echará a andar en un periodo marcado por los efectos del Covid-19. Efectos que, previsiblemente, reforzarán la conflictividad con las patronales aletargada durante el largo impasse del procés.

Continuidad y cambio

"Estamos en medio de un proceso de transformación y con una situación política muy encallada en Cataluña", señala un miembro de la candidatura. La gestión de la economía post-pandémica será un reto mayúsculo, coinciden otros sindicalistas consultados por Crónica Global. Pero están preparados para echar el resto en caso de que estallen nuevos focos de conflicto laboral en la comunidad, sobre todo cuando decaiga definitivamente el colchón de los expedientes de regulación temporal de empleo (ERTE).

Para su futura ejecutiva, Pacheco ha contado con personas como Andrés Querol (secretario de organización), Ricard Bellera (secretario de trabajo y economía), Dolors Llobet (secretaria de atención a la afiliación y coordinadora de estudios) y Cristina Torres (secretaria de acción sindical), que han asumido responsabilidades importantes en el último mandato. Este cuarteto sumará fuerzas con otros candidatos como Michela Albarello (organizadora del congreso y uno de los valores al alza de la organización), Aurora Huerga, Carmen Juares, Álvaro Muñoz y Enrique Rodríguez, que se integrarán en la cúpula sindical por vez primera.

Retos pendientes

En la hoja de ruta se hallan dos puntos estratégicos que se harán un hueco en la ejecutiva. Por un lado, la cuestión referida a las nuevas realidades del trabajo, término que engloba tanto el trabajo doméstico como los falsos autónomos que mantienen una relación laboral con plataformas digitales como Glovo o Uber Eats. El sindicato ha participado activamente en el desarrollo de la ley rider y, ahora, incorporará una secretaria propia en la dirección --hasta ahora esta área no tenía este estatus--. Secretaría que, entre otros temas, tendrá sobre la mesa precisamente la definición de un marco laboral para las trabajadoras del hogar.

Por otro lado, se agavillarán todas las materias relacionadas con el Estado del Bienestar --como salud, educación y dependencia-- en una secretaria propia que obrará como coordinadora de las políticas de gasto social. Se trata de dos objetivos a los que se unirán preocupaciones como el feminismo, la inmigración y la sostenibilidad, nuevos puntos de interés de CCOO, que de un tiempo a esta parte ha incorporado estas dinámicas a su programa de actuaciones.

Primeros en delegados

Por otro lado, la máxima cita regional llega tras un intenso periplo de renovación sectorial y territorial. De hecho, el proceso arrancó el pasado nueve de diciembre con la celebración de 655 asambleas directas y 134 asambleas transversales que reunieron a casi 15.000 afiliados. Tras esta primera fase de consulta, el sindicato ha renovado sus cargos en las federaciones, territoriales y otros órganos --como la asamblea nacional de Acció Jove-- en dos etapas de congresos sectoriales.

Un intenso periodo congresual en que ha cundido la unidad interna entre las distintas familias de la organización. Un hito organizativo y, en parte, un respaldo a las buenas cifras obtenidas por el equipo de Pacheco durante los últimos cuatro años. Pese a la irrupción de la pandemia, los datos de afiliación han aumentado entre 2016 (140.078 personas) y 2020 (147.632). En total, CCOO cuenta con 21.226 delegados a fecha de febrero de 2021, por delante de UGT (19.127), su rival directo en la pugna por la representación sindical en la comunidad. En cuanto a los ingresos, el sindicato ha mantenido un 87,6% de recursos propios y ha necesitado solo una inyección pública del 12,40% del presupuesto anual del ejercicio anterior.

Contaminación 'indepe'

Buenos datos en tesorería y buenos datos en la nómina de afiliados. De hecho, el único elemento que podría enturbiar el congreso autonómico está al margen de la acción sindical. De las cuatro resoluciones que se someterán a votación entre los asistentes, la de contexto político amenaza con concitar el rechazo de una facción interna de signo independentista.

Este grupo escasamente definido y sin un líder visible, pero con posiciones en algunas zonas como el Maresme, Osona o el Penedès y en sectoriales como la de servicios públicos, amaga con presentar un documento alternativo. El motivo: la exclusión del texto de una referencia explícita a los indultos o amnistías.

Respaldo transversal

Sin embargo, fuentes de la candidatura rebajan la preocupación por estos movimientos internos, que califican como minoritarios. "El consenso que hemos alcanzado es amplio sobre el diagnóstico de la situación política en Cataluña", resumen. El debate interno siempre ha existido, apuntan, tanto por el lado más proclive a la independencia como por aquellas voces menos contemporizadoras con el procés. Aunque si se presentara una resolución alternativa, se rompería la unanimidad en este punto lograda en los dos congresos regionales anteriores.

En cualquier caso, la resolución sobre el futuro político de la comunidad que se someterá a aprobación el próximo 23 de mayo contará con un intenso trabajo previo de búsqueda de complicidades. Si nada trastoca los planes de Pacheco, se espera que su propuesta para actualizar la cúpula sindical cuente con un gran respaldo entre los delegados. Queda una semana para que se despeje el futuro del sindicato en Cataluña.