La pifia del equipo de gobierno municipal de Barcelona con el Peuat, el plan hotelero de control del crecimiento de licencias, anticipa un alud de demandas. Los abogados ven al menos tres vías para reclamar ante el ayuntamiento después de que el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) haya anulado el cerrojazo de licencias de alojamientos turísticos.
La teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz, aseguró ayer que el revés de la justicia a esta hoja de ruta "no provocará indemnizaciones, como algunos defendieron", ni se permitirán más aperturas de hoteles o pisos turísticos en el centro de la ciudad. Preguntado por esta versión, su equipo de prensa se ha ceñido a las declaraciones de la concejal de BComú en rueda de prensa. La firmeza de sus declaraciones contrasta con la visión de abogados especializados en urbanismo, que ven tres vías para denunciar a la Administración local.
La pifia de Colau con los hoteles anticipa un alud de demandas / EP
"Aprovechar los meses tras la anulación"
Joaquim Sallarés, letrado del área de urbanismo de Tornos Abogados, avanza que la decisión del TSJC supone que "el ayuntamiento ha hecho las cosas mal". Sallarés, una voz autorizada, pues fue este profesional quien tumbó el plan de usos que limitaba los pisos turísticos en el distrito de Ciutat Vella de 2013, avanza que habrá operadores que busquen "pescar en río revuelto". De hecho, desde Tornos Abogados admiten que representan a gestores y propietarios de pisos turísticos que pidieron licencia y se la denegaron. Ahora recurrirán de nuevo, espoleados por la decisión del TSJC.
"Tendrán derecho a impugnar el no a su licencia los que entraron comunicaciones de actividad desde las primeras sentencias contra el Peuat --en verano de 2019-- hasta la suspensión de licencias --en noviembre del mismo año--", avisa. "Aquellos meses no hubo norma que regulara los pisos turísticos, por lo que se podrá recurrir una negativa municipal, los que la recibieron", agrega. Ello crea una "situación incómoda para el ayuntamiento", pues "ahora no se pueden pedir nuevas licencias, pero la decisión del TSJC sí abre una venta temporal durante la que se pudieron pedir permisos. Veremos cuántos lo hicieron".
"Se pueden impugnar las suspensiones"
Por su parte, Marc Pertíñez, socio fundador de Pertíñez Romagosa, duda también del "todo el mundo tranquilo que comunica el ayuntamiento". ¿Por qué? "Porque administrativamente lo denegarán todo, pero en los tribunales se pueden reclamar las declaraciones responsables de nuevos pisos turísticos y hoteles", avisa. ¿Cuáles? "Todas las entradas y rechazadas entre el 15 de noviembre de 2019, fecha de la suspensión de licencias actual, y la anterior, de julio de 2015. Durante aquel periodo rigió el primer Peuat, y el plan ha sido anulado. Las comunicaciones que se entraron podrán desplegar sus efectos, pues el ayuntamiento, a nivel jurídico, no tenía absolutamente nada para frenarlas, como ha dictado el TSJC", recuerda el letrado.
En paralelo, este profesional detecta otro punto débil en la estrategia municipal. "El punto clave es que el ayuntamiento ha abusado de las suspensiones de licencias, que recoge la Ley de Urbanismo de Cataluña. Entre moratorias y planes ilegales, ha dictado seis desde 2014, lo que desde el punto de vista de la seguridad jurídica es inaceptable", razona. "A efectos prácticos, los gobiernos municipales han bloqueado el acceso a una actividad económica una y otra vez. Por ello, se pueden pleitear las comunicaciones de inicio de actividad", avisa. De hecho, su bufete representa a unos cuantos operadores que estaban a la espera del TSJC. "El ayuntamiento lo denegará todo acogiéndose a que falta éste o aquél informe. Pero los tribunales decidirán", concluye.
"Reclamar el lucro cesante"
Por su parte, el abogado David Neila, de NN Legal Group apunta a una tercera posibilidad para demandar a la Administración local. "La responsabilidad patrimonial. Si un promotor trató de obtener una licencia para abrir un hotel o alojamiento turístico y no se la concedieron en base al plan anulado, se abre la vía para resarcir", advierte. Ello es así porque "el ayuntamiento restringió ilegalmente una actividad económica", con "las pérdidas que ello supone para el operador que quería entrar en el mercado, y no lo pudo hacer". Los demandantes, no obstante, deben "recabar pruebas" del perjuicio que les generó la Administración al denegarles la licencia, por lo que una reclamación patrimonial "no es automática".
"El Peuat es un acto administrativo anulado por los tribunales. Esa actuación de la Administración privó a algunos promotores de ejercer unos derechos que sí tenían. Si lo hicieron todo correctamente, les asiste el derecho a reclamar. Es un caso similar a de los clubes de ocio nocturno del Puerto Olímpico, que han sido desalojados en un proceso judicial aún en marcha. Si hay sentencia condenatoria contra el ayuntamiento, se abrirá la reclamación patrimonial", describe.
"Se reactivarán los contenciosos de hoteleros"
Otra fuente del sector que ha preferido no aportar su nombre ha querido matizar lo que podría pasar con los hoteles frustrados, por un lado, y con los apartamentos turísticos vetados, por el otro. "Pienso que se reactivarán los contenciosos administrativos contra las negativas del Ayuntamiento de Barcelona de concesión de licencia hotelera solicitadas antes de la segunda moratoria de 2019", ha manifestado. "Cuando se ganen estos contenciosos, las cadenas podrán reclamar daños patrimoniales", ha añadido. ¿Y los pisos vacacionales? "Al quedar anulado el Peuat, rige aún el Pehut, un plan previo específico para pisos turísticos. También está anulado por el TSJC, pero la sentencia no es firme. Cuando lo sea, se abrirá la vía judicial", ha apostillado.
Cabe recordar que el consistorio ha intentado frenar el daño de la eliminación en los tribunales del plan hotelero, que se vendió como una de las grandes políticas de Ada Colau, con una nueva moratoria de licencias. Se dictó a finales de 2019 y se completó con la redacción de una nueva hoja de ruta sobre los establecimientos turísticos en la ciudad a principios de 2021. Según el equipo de gobierno municipal, el actual armazón impide nuevas aperturas de hoteles y apartamentos para visitantes en buena parte de la Ciudad Condal.
Todos los abogados consultados, no obstante, indican que si un promotor entró una petición de licencia antes de la primera fecha y se la rechazaron, gana enteros que el proyecto pueda prosperar al haber sido perjudicado por una norma inexistente. Ello no devolverá algunos de los hoteles icónicos que trataron de abrir en Barcelona, como el Four Seasons de la Torre Deutsche Bank --ahora un proyecto de viviendas de superlujo-- o el Hyatt de la Torre Glòries, que ahora alberga oficinas, y no lo lograron. Con todo, sí se contemplan nuevos establecimientos en la ciudad. Eso sí, obtendrían los permisos necesarios tras un nuevo litigio.