Una mujer en una terraza: la restauración pide al Govern abrir hasta las 23 horas / EP
La restauración exige al Govern que rectifique y permita abrir hasta las 23 horas en Semana Santa
Fecasarm prevé una nueva avalancha de cenas y fiestas ilegales si se mantienen las restricciones nocturnas en las actividades legales
25 marzo, 2021 14:30La Federación Catalana de Asociaciones de Actividades de Restauración y Musicales (Fecasarm) ha exigido al Govern que rectifique su decisión de cerrar la restauración y el ocio nocturno a partir de las 17:00 horas durante la Semana Santa, y permita la apertura de estas actividades hasta las 23.00 horas.
Según ha manifestado esta patronal en un comunicado, la medida que está vigente provocará “que muchas personas de diferentes burbujas de convivencia opten por celebrar cenas y fiestas ilegales en domicilios particulares y otros espacios inadecuados, sin medidas de seguridad ni control”.
Cabeza de turco
El sector lamenta que la Generalitat sigue obviando que entre un 70 y un 80% de los brotes y contagios provienen de reuniones de familiares y amigos, mientras que tan sólo un 3% de los mismos se producen en espacios de restauración legales.
El sector legal se considera cabeza de turco de lo que califica como "un despropósito", y asegura que se encuentra más que legitimado a "exigir a las autoridades un control estricto de las actividades ilegales", dado que "paradójicamente, dependemos de la evolución de los datos epidemiológicos alimentados por contagios producidos en encuentros ilegales para conseguir más horas de actividades legales, lo que es del todo injusto.
Pérdidas de 272 millones de euros
Para el secretario general de Fecasarm, Joaquim Boadas, es totalmente injusto que, mientras el sector se encuentra ahogado económicamente, "se impongan restricciones que derivan en más contagios de los que se producirían si se permitiera el funcionamiento de las actividades legales”. Boadas cree que la Generalitat "debería buscar fórmulas alternativas” a unas restricciones que considera “desproporcionadas y arbitrarias”.
Si se mantienen estas medidas durante la Semana Santa, Fecasarm prevé unas pérdidas de 272 millones de euros para el sector mientras las cenas, los botellones y las fiestas ilegales no tendrán competencia.
