La Fiscalía Superior de Cataluña avala el cierre de la restauración durante 15 días. El ministerio público no pondrá objeciones al intento de clausurar los bares y restaurantes de toda la región, más de 30.000, durante un periodo de dos semanas. La medida aún no ha entrado en vigor. El Govern debe publicar de forma oficial la norma en el DOGC. Se espera que esto ocurra a las 0:00 horas del viernes y desde ese momento será el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) el que tenga la última palabra respecto a su encaje legal.
Fiscalía ha emitido informes sobre las propuestas que llevará el Govern al Procicat y que contienen fuertes restricciones a la economía. Dichas medidas, cree la oficina de Francisco Bañeres, no vulneran derechos fundamentales. Considera que no son desproporcionadas y allana el camino a su espaldarazo jurídico final. Ello no significa que el cerrojazo a la restauración pase el corte, pues patronales como el Gremio de Restauración de Barcelona y Fecasarm han anunciado que lo recurrirán ante el Alto Tribunal catalán que analizará a fondo la resolución.
El TSJC decidirá
Los escritos de las dos organizaciones empresariales recalarán en la Sección Contencioso-Administrativa de la segunda instancia judicial. Serán los magistrados de este estamento los que verán los recursos de la patronales de restauración y hostelería y deberán decidir si están amparadas por la normativa actual o no. Fecasarm ha anunciado que pedirá medidas cautelarísimas para que el TSJC tumbe la resolución el mismo día que se publique. Es decir, mañana viernes.
La patronal de actividades de restauración y musicales ha avanzado que se apoyará en otro dictamen anterior del Tribunal Superior catalán que altertaba de la limitación de competencias de la Generalitat para limitar su actividad. Hace referencia a la resolución que se publicó el 31 de julio y que prohibía a los establecimientos abrir más allá de medianoche. En aquella ocasión, los magistrados de la sala sí vieron desproporcionada la orden del Govern y la anularon. Ello da alas a la organización para abordar el nuevo recurso con cierto optimismo.
Cierre y aforo controlado
Tenga recorrido o no, el Ejecutivo catalán ha optado por tratar de limitar la actividad económica para doblegar el índice de rebrote de coronavirus en Cataluña. La propuesta impulsada por el presidente en funciones, Pere Aragonès (ERC), prevé el cierre de toda la restauración durante 15 días. Asimismo, se clausuran temporalmente los salones de estética salvo las peluquerías y todo del deporte no profesional queda hibernado.
En cuanto al comercio, el Gobierno catalán fija topes de aforo del 30% por el 50% en gimnasios y equipamientos culturales, tales como cines o teatros.