Una farmacia vende mascarillas durante el estado de alarma / EP

Una farmacia vende mascarillas durante el estado de alarma / EP

Business

Las farmacias se pillan los dedos con las cremas solares y los productos de verano

La compra de artículos destinados a las vacaciones y el calor se hizo en enero, y ahora podrían quedarse en las estanterías

12 mayo, 2020 00:00

Las farmacias, a pesar de las largas colas que se forman todas mañanas debido a las medidas de seguridad, viven una situación delicada debido a la crisis del coronavirus. A las pérdidas registradas en numerosas boticas por comprar mascarillas a precios más altos antes de que el Gobierno impusiera un tope, se suma ahora la campaña de la venta cremas solares y otros productos que suelen comprarse en verano, que amenazan las cuentas del sector. 

La venta de protectores contra el sol, antimosquitos o cremas hidratantes supone alrededor de un 20% de la facturación en una farmacia durante los meses de mayo, junio, julio y agosto, según estiman los empresarios consultados. Algo que este año no va a suceder. “Ya hemos perdido las campañas de Semana Santa, del puente de mayo y todo indica que junio también va a ser nefasto porque no todas las provincias van a pasar de fase”, argumenta una de las dueñas de una farmacia.

Pérdidas en este año

No hemos vendido ni una crema solar este año”, se queja otro farmacéutico. Y es que, en contra del tópico, este tipo de lociones también se utilizan diariamente antes del verano. Tal y como subrayan desde FEFE (Federación Empresarial de Farmacéuticos Españoles), muchos de los usuarios son deportistas o trabajadores que necesitan protegerse de los rayos solares por su actividad habitual.

“Con el confinamiento, las actividades deportivas han parado y los trabajadores no han podido ir a sus puestos, por lo que la venta de productos ha caído en picado”, señalan desde la organización. 

Pedidos en enero

Para entender la preocupación de los farmacéuticos hay que conocer el sistema de compra que suele aplicarse en el sector respecto a los productos más veraniegos como los protectores, las lociones para el uso post-bronceado o los repelentes de mosquitos.

Las farmacias hacen la precompra en enero, abonando la cantidad en el momento o a plazos. Y como cada año, las boticas hicieron sus pedidos sin atisbar la gran crisis sanitaria y económica que sacudió a todo el mundo dos meses después. Todos los artículos llegaron a las farmacias españolas en marzo de cara a la campaña de verano y, ahora, se acumulan en las estanterías. 

Márgenes amplios

De hecho, los beneficios de esta mercancía supone un desahogo en las cuentas de las farmacias ya que suelen tener un margen bruto de en torno al 30%. Algo que no sucede con los medicamentos, puesto que los precios están regulados y, si están cubiertos por la Seguridad Social, suelen ser genéricos, o sea muy baratos. 

Además, el comercio de parafarmacia en España estaba en pleno auge. Según datos de la consultora Iqvia, durante 2019 las ventas se incrementaron casi un 6%. Los productos para el cuidado de la piel suponen el 60% de la facturación total de ese subsector en España. Para las boticas españolas, la venta de protectores solares para adultos supone un impacto de casi 30 millones de euros.

El ecommerce y los supermercados

“Si las ventas han caído en picado en estos productos, las pocas que se producirán será a través de los supermercados, porque el precio es inferior”, señala la responsable de una farmacia consultada. 

Los precios en dichos establecimientos son bastante más bajos. Y la razón por la que tienen precios más competitivos son los descuentos que aplican los fabricantes debido a la gran cantidad de stock que demandan los supermercados o las grandes cadenas de perfumería. Es habitual ver como Carrefour, Mercadona, El Corte Inglés y Alcampo, entre otros, cuidan la sección de parafarmacia con espacios con luz, suelo y decorado diferente que el resto de los pasillos, dándole un aspecto que evoca más una farmacia que una perfumería. 

Según el estudio anual de la consultora Iqvia, las ventas de productos de parafarmacia en el comercio electrónico han crecido un 54% y ya tienen una cuota de mercado de 187 millones.