Una mujer pasa por delante de unos taxis durante la huelga del pasado enero / EUROPA PRESS

Una mujer pasa por delante de unos taxis durante la huelga del pasado enero / EUROPA PRESS

Business

¿Taxímetro o tarifa cerrada? Los taxis de Barcelona se renuevan para competir con las VTC

Los usuarios que soliciten un vehículo a través de las aplicaciones tendrán la opción de viajar con un precio establecido de forma previa

8 junio, 2019 00:00

Los taxis de Barcelona y su área metropolitana estrenan este sábado tarifa cerrada, una opción que solo se podrá contratar desde las aplicaciones móviles. Se trata de una reivindicación del sector, que adopta uno de los principales reclamos de las VTC como Uber y Cabify, que informan al usuario del precio del viaje de forma previa. Así, a partir de ahora el cliente podrá elegir entre esta opción o el taxímetro.

La tarifa fue aprobada el pasado abril por el Área Metropolitana de Barcelona (AMB) y entra en marcha este sábado, aunque no todas las aplicaciones estarán actualizadas este día. Desde el Instituto Metropolitano del Taxi (Imet) detallan que será una “incorporación progresiva” y que pasarán unas semanas hasta que la cobertura sea total. Desde NTaxi App o Taxi Ecològic cuentan ya con la validación para operar, y desde la mayoritaria MyTaxi explican que tardarán unos días más en ofrecer el servicio.

Precios similares

Mientras quienes cojan un taxi por la calle solo podrán viajar con el taxímetro, los que lo reserven a través de alguna aplicación podrán elegir entre el sistema tradicional o la tarifa cerrada. Así, el usuario puede verse en la tesitura de cuál es la opción más económica. Sin embargo, tanto el Imet como los sindicatos aseguran que el sistema se vale de un algoritmo que calcula la ruta y las condiciones del tráfico, por lo que el coste final debe ser similar. “Habrá algún itinerario que pueda quedar por debajo o por encima, en función del modo de conducción o de los semáforos, pero por lo general, los importes son prácticamente los mismos”, explica María Teresa Carrillo, gerente del Imet.

La nueva tarifa cerrada incluye una bajada de bandera de 3,20 euros, frente a los 2,20 del taxímetro, y un coste de 1,77 euros por kilómetro --1,82 euros en horario nocturno y festivos-- para una carrera que no sobrepase los 5 kilómetros. Para un viaje que supere los 10 kilómetros, el precio es de 1,26 euros cada kilómetro --1,39 euros en horario especial--. Asimismo, un viaje al aeropuerto tendrá un importe de 20 euros.

Carrera corta o tráfico congestionado

Desde el sector explican que en días de congestión del tráfico la tarifa cerrada puede ser una opción mejor, mientras que para una carrera corta es preferible el taxímetro ya que la aplicación tiene un precio mínimo de 7 euros. No obstante, aseguran que el algoritmo trata de calcular todas las variables para que el margen de diferencia sea mínimo.

“La tarifa cerrada da la seguridad al cliente de lo que va a pagar”, señala el portavoz de Élite Taxi, Tito Álvarez, que destaca que el siguiente paso debe ser el lanzamiento de una aplicación de titularidad pública que englobe a todos los vehículos de la AMB. Según éste, el nuevo sistema servirá para captar a clientes que se habían pasado a las VTC ya que “con el taxi no se van a encontrar ninguna sorpresa. Si contratas un Cabify para mañana te dan un precio y luego te cobran otro. La tarifa del taxi es un precio cerrado que no cobra más porque llueva, porque haya un concierto o porque haya más demanda”.

Competencia con Uber y Cabify

En la misma línea se mueve Antoni Servos, secretario de organización del Sindicato del Taxi de Cataluña (STAC): “Más que en si se va a ahorrar más o menos [con el taxímetro o con la tarifa cerrada], lo que tiene que valorar el usuario es si es más o menos barato que Uber o Cabify”

“No esperamos una vuelta de clientes, porque la fuga actual no es tan alta, lo que queremos es dar al usuario lo que pide”, continúa Servos, que considera vital que “las aplicaciones se publiciten lo suficiente” para que los usuarios lo conozcan, en especial los turistas, quienes acaba usando las VTC por su "globalización”.