Abertis se lanza a por el 100% de los túneles del Cadí y Vallvidrera
Formaliza la oferta a Ardian para adquirir el 49,99% que aún no está en sus manos, una participación valorada en más de 110 millones
17 diciembre, 2018 14:09Abertis, el gigante de las infraestructuras que controlan ACS y Atlantia, ha formalizado su intención de tomar el 100% de la propiedad de la sociedad que gestiona los principales túneles de la Generalitat. La salida de Barcelona por la zona de Vallvidrera y el del Cadí, la entrada desde la capital catalana a una de las zonas vacacionales favoritas de Cataluña, la Cerdaña.
El grupo presidido por Marcelino Fernández Verdes, ejecutivo de confianza de Florentino Pérez, presentó el pasado viernes una oferta de compra a su socio Ardian, tal y como avanza El Economista. El fondo francés controla aún el 49,99% de la compañía Túnels Barcelona Cadí, una participación minoritaria que está valorada en 110 millones de euros. El resto del capital está en manos de Abertis.
Cierre de la operación en 2019
El grupo de capital riesgo se toma unos días para estudiar a fondo la operación, indican fuentes conocedoras de la misma. Por lo que podría ser que no se cerrara antes de que concluya el ejercicio en curso por el calendario laboral de lo que queda de diciembre.
Ardian entró en la compañía a finales de noviembre de 2011. No divulgó en ese momento el importe que devengó para tomar el 65% de la propiedad de los dos túneles de peaje, la participación que implicó que el banco de inversión brasileño BTG Pactual saliera de Cataluña.
Primera compra de Abertis
Abertis ya compró el 15,01% que controlaba la firma de capital riesgo gala en julio de 2015 por 34 millones de euros. Fue en ese momento cuando se quedó con la mayoría de la concesionaria, que gestionará las dos infraestructuras hasta 2037.
Las dos compañías implicadas en la operación, Ardian y Abertis, mantienen otros negocios paralelos. Son socios en Sanef desde 2005 junto a un tercer fondo de inversión especializado en el sector de las infraestructuras.
La Generalitat concesionó la gestión de los túneles de Vallvidrera y el Cadí en 2012. Lo hizo en el marco de la oleada de privatizaciones y venta de edificios públicos que se activó ese ejercicio para conseguir ingresos extraordinarios en el momento más duro de la crisis. Se colocó al mercado junto con Aigües Ter Llobregat (ATLL) y se sumó al mismo inversor en ambas operaciones, BTG. El final de la operación ha sido mucho más positiva.