Foment del Treball llevará al Supremo la huelga independentista
La junta directiva de la patronal catalana decide acudir a casación tras la decisión del TSJC de avalar la convocatoria de la protesta del pasado 8 de noviembre
8 mayo, 2018 00:00Foment del Treball abre la puerta a presentar un recurso de casación ante el Tribunal Supremo para demostrar que la huelga general del pasado 8 de noviembre era sólo una protesta con motivos políticos al margen de la legislación actual. Así lo decidieron la junta directiva y la comisión ejecutiva de la patronal en la reunión que tuvo lugar este lunes.
En el transcurso del encuentro de la cúpula, encabezada por Joaquim Gay de Montellà, se decidió solicitar el dictamen jurídico en el que se expongan los argumentos que se deben incluir en el recurso. La patronal catalana mantiene de este modo el pulso jurídico abierto contra Intersindical-CSC, una organización con el 0,488% de la representatividad en Cataluña y que convocó la huelga general coincidiendo con el segundo paro de país, una protesta contra la aplicación del artículo 155 y la entrada en la cárcel de los políticos independentistas que protagonizaron el procés.
Varapalo del TSJC
El Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) ha tumbado los argumentos de la patronal catalana en una resolución que ha sido notificada a las partes este lunes. La parte demandada la conformaba tanto Intersindical-CSC, una organización presidida por uno de los fundadores de Terra Lliure, Carles Sastre, como el denominado comité de huelga.
La Sala de lo Social del alto tribunal catalán tumba los argumentos de Foment del Treball en una sentencia de 33 páginas en la que apunta a que la protesta de principios de noviembre fue una “huelga mixta, con motivación política y laboral”. Afirma que esta declaración “entra dentro del derecho fundamental de huelga”.
Una ‘huelga mixta’
Asegura que tras la petición de un paro de productividad de Intersindical-CSC existía la voluntad de denunciar la “situación política en Cataluña en septiembre y octubre de 2017”, pero considera que también tenía “otros [motivos] claramente laborales”. Como la “reducción de costes salariales y empobrecimiento, crisis económica y reforma laboral o políticas de salid de la crisis”, entre otras.
También desmonta otros de los argumentos que puso sobre la mesa Foment del Treball, como la baja representatividad de Intersindical-CSC para poder convocar una huelga general o el error en la notificación.
El TSJC indica que el sindicato, aunque sea pequeño, cuenta con el poder necesario para ejercer un derecho fundamental y recuerda que no sólo hizo la convocatoria en el tiempo y la forma necesaria, señala que el anuncio de huelga registrado inicialmente en el Departamento de Trabajo de la Generalitat era bastante más amplio. De hecho, se movió entre el 30 de octubre y el 9 de noviembre.
Críticas de Foment
Antes de aprobar mantener vivo el litigio, el responsable jurídico de Foment del Treball, José Luis Salido, mostraba sus reparos en que esta denominación de huelga mixta tenga cabida en el ordenamiento jurídico vigente. Una normativa preconstitucional que nunca se ha actualizado por la falta de acuerdo que suscita.
Manifestó el “respeto a las decisiones jurídicas” por parte de la patronal, pero anunció que estudiarían a fondo los argumentos jurídicos esgrimidos por la Sala de los Social del TSJC para dar forma a lo que consideran que es una nueva fórmula de convocatoria de huelgas. Será finalmente el Tribunal Supremo el que tenga la última palabra.