Turistas escandalosos en la playa del barrio barcelonés de la Barceloneta, el barrio más saturado de la ciudad / EFE

Turistas escandalosos en la playa del barrio barcelonés de la Barceloneta, el barrio más saturado de la ciudad / EFE

Business

Airbnb y el Ayuntamiento de Barcelona firman la paz

Acuerdo para excluir 1.000 pisos turísticos ilegales este mes y respetar el 'homesharing' colaborativo

26 julio, 2017 13:42

El Ayuntamiento de Barcelona y Airbnb firman la paz. Las dos partes han llegado a un acuerdo el miércoles por el cual la plataforma excluirá con carácter inmediato 1.000 anuncios de pisos turísticos ilegales. A cambio, el equipo de gobierno municipal respetará los apartamentos compartidos con turistas, el llamado homesharing. Estas viviendas quedarán fuera de las medidas punitivas de la corporación contra las viviendas vacacionales sin licencia.

Hace unos días, el consistorio y la multinacional habían acordado que ésta procedería a retirar 1.000 anuncios de su web correspondientes a otros tantos pisos turísticos ilegales, cuya relación facilitarían las autoridades a Airbnb.

Según ha informado la tecnológica, la fumata blanca ha salido tras una reunión entre representantes de Airbnb y la teniente de alcalde de Urbanismo, Janet Sanz, y el concejal de Turismo, Agustí Colom.

Tras el encuentro, Sanz ha subrayado en las redes sociales que la puntocom efectivamente retirará los anuncios de pisos ilegales de su web este mismo mes. "Ser exigentes funciona, seguiremos siéndolo", ha tuiteado la concejal de BComú.

"Turismo sostenible"

Airbnb hace su propia lectura del acuerdo. Sergio Vinay, responsable de políticas públicas de Airbnb, ha recalcado que los vecinos que alquilan habitaciones a turistas se salvarán de las inspecciones --y sanciones-- municipales contra el alojamiento turístico ilegal en Barcelona.

"Se trata de proteger a las familias barcelonesas que comparten su propio hogar, luchar contra los malos actores y avanzar hacia el turismo sostenible", ha indicado el directivo.

Fin a una larga batalla

La entente alcanzada entre Airbnb y Barcelona el miércoles supone poner fin a una larga batalla legal entre el Ejecutivo local de BComú y PSC y la multinacional. El equipo de Ada Colau ha actuado contra la plataforma por anunciar pisos turísticos sin el preceptivo permiso en los últimos años.

La corporación impuso el año pasado una multa de 600.000 euros a la intermediaria y a Homeaway por anunciar apartamentos sin licencia. El expediente se formalizó el pasado junio. El mismo mes, el equipo de equipo de gobierno amenazó con otra sanción de la misma cuantía por "reiteración".

Antes, Airbnb se había situado en la diana pública debido a la epopeya de una propietaria de un piso que tuvo que reokuparlo tras encontrarlo realquilado en el portal on line.

Acuerdo previo

En paralelo a esta mano de hierro, Sanz y Colom habían tendido un guante de seda a las páginas web que sí cumplían.

El pasado mayo, los dos políticos anunciaron un acuerdo con HomeAway, Booking, Tripadvisor, Rentalia y la patronal de apartamentos turísticos Apartur para luchar contra el arrendamiento irregular a turistas, una de las fuentes del turismo basura que llega a la capital catalana.

Airbnb denunció haber sido excluida del acuerdo, mientras que el ayuntamiento respondió que la intermediaria carecía de voluntad para eliminar la oferta ilegal.

En esta larga pugna que se cierra hoy miércoles subyace el debate sobre el turismo masivo en Barcelona, que ha generado problemas de saturación en algunas zonas de Barcelona y acusaciones de repunte del precio de los alquileres convencionales.