Usuarios en el andén de una parada del Metro de Barcelona / EFE

Usuarios en el andén de una parada del Metro de Barcelona / EFE

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La guerra en el Metro de Barcelona se enquista

La tensión entre los trabajadores y la dirección de TMB y el Ayuntamiento afecta al servicio diario de forma encubierta y tiene en la diana los grandes eventos económicos y sociales de la ciudad

1 abril, 2016 22:30

Barcelona sufre una huelga en el servicio de metro. El conflicto enquistado entre la plantilla y la dirección de Transports Metropolitans de Barcelona (TMB) y el Ayuntamiento, liderado por Ada Colau, ha llegado al punto en el que las afectaciones en el servicio se repiten de forma diaria, indican fuentes cercanas a la cúpula empresarial. Se habla de forma abierta de protestas encubiertas, incluso desde los usuarios del servicio.

Los últimos días los tiempos de espera de los metros en las estaciones han crecido y empieza a ser un comentario habitual entre los pasajeros.

Equilibrio delicado

El equilibrio entre la comprensión ciudadana ante una protesta laboral y el enfado de los damnificados es delicado, y desde la dirección de la empresa pública se espera que la balanza se decante a su favor. Fuentes sindicales niegan que se haya producido ninguna huelga de celo en las últimos días en la capital catalana.

Reconocen que las negociaciones están bloqueadas desde hace "semanas" y que por ello se aprobó un nuevo calendario de paros con el foco puesto en grandes eventos sociales y económicos de la ciudad. No ha ayudado la publicación de los salarios y el anuncio de que se dará a conocer lo que cobra la dirección de la empresa pública por parte del consistorio, manifiestan los mismos interlocutores.

Problemas en el 'clásico' y Alimentaria

De entrada, desplazarse en metro este sábado hasta el Camp Nou para ver el clásico será complicado. Entre las 18.30 y las 23 horas de la noche, en pleno partido, sólo circularán el 50% de los trenes que suelen ser habituales en fin de semana. Estos son los servicios mínimos decretados por la Consejería de Trabajo de la Generalitat. También habrá paros durante la mañana que serán más evidentes para los usuarios, ya que el departamento sólo ha pedido que circulen el 20% de los convoyes.

Si la situación se mantiene igual de estancada en las próximas semanas, el transporte público también fallará para llegar al salón Alimentaria. Se trata del segundo gran puntal de las finanzas de Fira Barcelona tras el Mobile World Congress (MWC), el congreso tecnológico que ya sufrió por los parones en el metro en febrero.

La feria abrirá las puertas del 25 al 28 de abril en el recinto Gran Vía, situado en Hospitalet del Llobregat (Barcelona). Se calcula que su impacto económico alcanza los 170 millones y se espera atraer a 140.000 asistentes.

Calendario de negociación

Quedan tres semanas para el evento, los trabajadores consideran que hay tiempo suficiente para alcanzar un acuerdo. La dirección y los sindicatos se encuentra cada martes y jueves en el recinto del Hospital de Sant Pau de Barcelona.

En cuanto a las peticiones, son las mismas que estaban sobre la mesa para evitar la protesta en el MWC: bajar la precariedad en las nuevas contrataciones y ganar condiciones de corte social. Preocupa especialmente las contrataciones iniciadas para cubrir las vacaciones de verano, ya que las 150 personas que se incorporarán temporalmente a la plantilla del metro sólo lo harán al 75% de la jornada laboral corriente.

Falta de efectivos

Se trata de la opción es más económica para las arcas de TMB pero impacta en el servicio, indican con los trabajadores, ya que no se puede cubrir la frecuencia de paso habitual en un momento en el que la ciudad atrae al mayor número de turistas del año.

De hecho, algunos trabajadores señalan que las afectaciones en el servicio de los últimos días se deben a que se empiezan a cumplir a rajatabla las condiciones laborales contractuales. Mantienen que es la muestra más clara de que faltan brazos en el metro.

Seis reuniones

La negociación entra de nuevo en un momento de máxima presión. Para evitar los problemas en Alimentaria, la dirección de TMB y Colau disponen de seis reuniones, a las que se podrían añadir otros encuentros extraordinarios si es necesario, para alcanzar el pacto que no han conseguido en los últimos nueve meses.

El conflicto sigue vivo.