Montaje con Antonio Alcántara, cofundador de Privalia
El descenso a los infiernos de Antonio Alcántara, cofundador de Privalia: quiebra, secuestro y 'ciberguerra'
El empresario, protagonista del primer auge del comercio electrónico en España, ha construido una trayectoria empresarial marcada por un rápido ascenso y un desenlace turbulento
De hecho, la sociedad que quedaba de Ofertix fue declarada en concurso necesario el pasado julio, con un pasivo de 2,7 millones de euros
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Antonio Manuel Alcántara, conocido por su papel en la primera oleada de plataformas de venta privada en España, vuelve a estar en el foco mediático: el empresario y cofundador de Privalia está actualmente siendo investigado en un procedimiento judicial que analiza presuntos delitos de secuestro, extorsión, revelación de secretos y difamación.
Bajo investigación
Alcántara afronta desde 2021 un procedimiento judicial abierto en el Juzgado de Primera Instancia número 2 de Esplugues de Llobregat, que investiga su posible relación con un secuestro y posteriores amenazas y ataques digitales. Todas las acusaciones se encuentran en fase de instrucción.
La denuncia parte de C.A., quien sostiene que en octubre de 2021 fue víctima de un secuestro de tres días a punta de pistola en el que, según su relato, fue obligado a firmar documentos en los que se autoinculpaba de gestionar páginas fraudulentas con un supuesto perjuicio económico de 30 millones de euros.
El denunciante afirma que también se le exigió transferir 55.000 euros y firmar un reconocimiento de deuda por tres millones de euros con la empresa Alsanta Capital, cuya administradora, según el escrito, sería la pareja de Alcántara, también investigada por el secuestro.
La denuncia señala que los secuestradores conocían los datos personales y financieros del afectado, y que el empresario y su pareja serían —siempre según el querellante— las únicas personas con acceso previo a esa información sensible.
Ataques por internet e investigación en curso
Tras el secuestro, la víctima afirma haber sido objeto de una campaña de desprestigio mediante publicaciones en internet bajo distintos seudónimos, en las que se le señalaba como "estafador" y "líder de una banda". Estos ataques motivaron, a inicios de 2023, la presentación de una querella por difusión no autorizada de datos personales y por daños a su imagen.
En febrero de 2024 se celebró finalmente una rueda de reconocimiento, tras haberse suspendido una primera convocatoria por ausencia del investigado, según la documentación aportada por la acusación. Tras la identificación, la defensa del denunciante presentó una ampliación de la querella, asegurando que los ataques digitales persistían.
De Privalia a Ofertix
Paralelamente a este descenso a los infiernos, Alcántara cuenta con una amplia trayectoria empresarial. Formó parte del equipo fundador de Privalia en 2006, una de las primeras plataformas de moda con descuento que irrumpieron en el mercado español.
Durante el primer año ejerció como consejero delegado, hasta 2007, cuando vendió sus acciones a un inversor y se desvinculó del proyecto. Desde la propia compañía han confirmado que su implicación en el negocio se ciñó a esta etapa inicial y que, desde entonces, no guarda relación alguna con la empresa.
Tras su salida de Privalia, Alcántara impulsó en solitario el lanzamiento de Ofertix, un outlet online que rápidamente alcanzó notoriedad y que, con el tiempo, absorbió otras plataformas del sector como LetsBonus, Groupalia y Offerum.
Sin embargo, el éxito no se mantuvo. En 2017, Groupalia registró una caída drástica de ingresos, despidos y un aumento de impagos. La situación derivó en que, en julio de 2023, la matriz del grupo fuera declarada en concurso de acreedores tras acumular una deuda de 2,7 millones de euros.
Conflicto económico previo
El enfrentamiento entre ambas partes no es unidireccional. En el marco del conflicto, Alcántara habría denunciado a C.A. por una supuesta estafa de 150.000 euros relacionada con operaciones de inversión a través de brókers. Esta causa también se encuentra abierta y en fase de instrucción.
Auge y la caída
Figura destacada del primer boom del comercio electrónico en España, Antonio Manuel Alcántara acumula un historial empresarial tan rápido en su ascenso como convulso en su desenlace. A ello se suma ahora un proceso judicial complejo, con acusaciones cruzadas y un presunto secuestro que el juzgado continúa analizando.
Mientras tanto, el querellante asegura temer por su seguridad e imagen pública, y el tribunal avanza en una causa que combina aspectos financieros, tecnológicos y presuntos delitos de especial gravedad.
