La investigación del alunizaje que esta madrugada ha destrozado una farmacia de Montcada i Reixac (Barcelona) ha dado un giro inesperado pasado el mediodía.
Y lo ha hecho gracias a una vecina —y clienta habitual del establecimiento— que, tras ver las imágenes publicadas por Crónica Global, logró identificar el vehículo utilizado en el asalto: estaba aparcado a solo tres calles de la farmacia.
Vehículo robado
La mujer se ha topado con el Seat León blanco en una zona de estacionamiento del barrio, con las puertas abiertas y atravesado dentro del área de aparcamiento, ocupando parcialmente un paso para peatones.
Al asomarse, ha confirmado sus sospechas: el coche tenía un puente hecho, señal inequívoca de que había sido robado. En ese instante ha enlazado la escena con las imágenes del alunizaje y ha avisado de inmediato a los Mossos d’Esquadra y a las trabajadoras de la farmacia.
Un clásico de los alunizajes
A pesar de la brutalidad del golpe —tres impactos secos contra la persiana y el escaparate— el coche apenas presentaba daños: solo un leve desprendimiento del parachoques trasero.
No es casualidad. Fuentes policiales han explicado a esta redacción que el Seat León es uno de los vehículos más robados de España y uno de los modelos estrella para cometer alunizajes: resistente, potente y fácil de manipular.
Imagen del coche que han utilizado para cometer el alunizaje
Cuando los ladrones han abandonado el turismo ya no quedaba ni rastro de la caja registradora ni de los alrededor de 2.000 euros en efectivo que contenía.
Todo indica que, tras huir a gran velocidad, la batería de aluniceros tenía un segundo vehículo de apoyo esperándolos para hacer el “cambiazo” y desaparecer sin dejar rastro.
En busca de indicios
Sobre las 15:00 horas, una primera patrulla de Mossos ha llegado al lugar donde se encontraba el turismo y se ha mantenido allí hasta la llegada de la grúa. Un binomio custodiaba el coche para evitar la contaminación de pruebas mientras esperaban el traslado a dependencias policiales.
El vehículo será ahora analizado al detalle por la Policía Científica: huellas, restos biológicos, fibras, tierra adherida a la ropa o a las zapatillas… cualquier indicio puede ser determinante.
El coche, en este tipo de robos, suele convertirse en la principal fuente de prueba, motivo por el que habitualmente los delincuentes los queman o los destrozan antes de abandonarlos. En esta ocasión, sin embargo, lo han dejado intacto.
Imagen de cómo ha quedado el hueco de la caja registradora, después de que la arrancaran
La Policía Científica también ha recogido indicios a primera hora de la mañana en la farmacia, donde los asaltantes se dejaron un mazo y un extintor, herramientas que emplearon para romper el mobiliario y retirar los cristales antes de llevarse la caja.
No es un caso aislado
La investigación ya está en marcha y la dirige la División de Investigación Criminal (DIC) de los Mossos d’Esquadra. Que la DIC asuma el caso revela un elemento clave: no estamos ante un hecho aislado, sino ante una auténtica organización criminal.
Las primeras informaciones que ha podido obtener este medio apuntan a que los Mossos llevan semanas siguiendo a una batería de aluniceros de origen español, que podría residir en el entorno de Montcada i Reixac.
El caso de hoy no ha sorprendido a los montcadenses. Hace apenas diez días, otra farmacia del municipio sufrió un asalto calcado: vehículo robado, impacto directo contra la persiana y huida exprés con el efectivo.
Las similitudes son absolutas y las fuentes consultadas no descartan que se trate del mismo grupo.
En dos minutos
El asalto de este viernes arrancó a las 4:39 horas. Tres individuos llegaron con el Seat León blanco, encararon el vehículo y ejecutaron tres golpes certeros que reventaron la persiana y el escaparate.
En menos de dos minutos ya estaban dentro y se habían llevado la caja. A las 4:41, huían a toda velocidad. Las cámaras de seguridad, a las que ha tenido acceso exclusivo este medio, captaron toda la secuencia.
Las trabajadoras sospechan que los ladrones habían visitado la farmacia horas o días antes haciéndose pasar por clientes, ya que sabían exactamente dónde ir, qué romper y qué buscar.
Montcada, en alerta
Con este segundo ataque a una farmacia en apenas diez días, el pequeño comercio y los vecinos de Montcada viven con preocupación un aumento de hechos violentos que arrastran desde hace meses.
Fuentes de la Asociación Montcada Centre Comerç insisten en que se han puesto en contacto con el Ayuntamiento en múltiples ocasiones, pero que desde el consistorio solo les remiten al balance oficial de criminalidad, donde se refleja que los delitos han caído respecto al año anterior.
Los comerciantes, sin embargo, no se lo creen. Aseguran que la inseguridad —y la percepción de inseguridad— ha aumentado de forma evidente.
Además de estos dos alunizajes a farmacias, en septiembre otro asalto mediante el mismo método destrozó una panadería de la calle principal. También se han producido robos y atracos en el centro; uno de ellos, dentro de un establecimiento, donde una trabajadora fue víctima de un robo con violencia de una joya que llevaba puesta.
A ello se suman apuñalamientos en vía pública y un aumento de las redadas en bares conflictivos, especialmente los de la carretera Vella, donde los vecinos alertaban de peleas casi diarias desde hacía meses.
Pantallazo del momento de la detención en Montcada i Reixac
Tampoco ha ayudado la situación de los okupas del barrio de Mas Rampinyo, que han protagonizado constantes altercados que llegaron a ocupar portadas de diversos medios de comunicación.
Desde Montcada Centre Comerç lamentan que desde el consistorio se les trate “como locas o como pesadas” y que se niegue la problemática. “Nos dicen que es imaginación nuestra, que los datos son buenos, pero la calle dice otra cosa”, apuntan.
Comercios desprotegidos
Conviene recordar que hace apenas una semana, la propietaria de la farmacia asaltada hoy pidió al Ayuntamiento instalar bolardos para evitar un alunizaje. La respuesta fue clara: “Eso es seguridad privada”; y les aclaró que, si querían protección, debían pagarla ellas.
Pero, en su caso, las ordenanzas no les permiten invadir la vía pública con elementos privados y, además, no hay espacio físico para colocarlos. Resultado: están totalmente desamparadas.
Imágenes del alunizaje en una farmacia de Montcada i Reixac
