Casal TV, una plataforma pionera para disipar la soledad no deseada entre los mayores en Cataluña

Conxita Palau se despierta temprano para llegar a la primera sesión. Enciende la televisión y, en vez de salir cualquier magacín, saluda a sus nuevas compañeras. Por ahí están la Rosa, Custodio, y varios más, que se van conectando poco a poco a Casal TV, una plataforma digital que ha desarrollado Suara Cooperativa para fomentar el acompañamiento y disipar la soledad entre las personas mayores.

A partir de la pandemia, la cooperativa desarrolló este modelo que funciona como un casal físico, en el que se organizan sesiones de ejercicio físico, mental y de ocio, y para el que solo hace falta una webcam que se añade a la pantalla a usar y un convertidor para captar la señal. Con unos sencillos pasos, ya más de 200 usuarios han probado este sistema que parece convencer a quien lo utiliza. 

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Modelo catalán a exportar

Àngels Cobo i Puig, directora de la Oficina de Transformación Digital de Suara Cooperativa, dialoga con Crónica Global sobre este dispositivo que ofrece seis horas de seguimiento y está repartido por las cuatro provincias catalanas. También, en los centros de Administraciones públicas, como Sant Martí de Centelles, Torroella de Montgrí y La Garriga. Además, adelanta que están en negociación con la Generalitat, la Xunta de Galicia y algunas organizaciones de Andalucía.  

Conxita es vecina de Sant Boi de Llobregat. Creció, trabajó en Barcelona como carnicera, fue madre soltera, y siempre le encantó bailar. Bailaba todo lo que podía y más en las salas que estaban dispersas por el centro y, poco a poco, formó su familia, tejió su propia red de amistades y, con el tiempo, se jubiló a causa de la dolencia que padece en la pierna. Le cuesta moverse, pero continúa subiendo y bajando las escaleras de su edificio con esfuerzo y cogiendo el coche, donde su nieto hace de las suyas poniéndole la música que quiere en la radio: "¡Me la destroza!". 

Compartir cumpleaños y canciones de Harry Styles

Con 77 años, aunque ya cuenta los pocos días que le quedan para el cambio de dígito, atiende a este medio para hablar de las razones que la llevaron a instalarse Casal TV en su casa en el año 2021, cuando el mundo estaba un poco más apagado y delimitado que ahora. "Conocemos a gente y hacemos esta especie de familia", dice, con la que celebran los cumpleaños, Halloween, carnavales, Sant Joan y hasta las Navidades. Preparan refrigerios y panellets, se sientan delante del aparato y comparten una charleta entretenida mostrando sus manjares y mejores galas.  

Al tener limitaciones de movilidad, vio una buena opción contratar este servicio. "Yo salgo y entro, pero hay señoras, como una que estaba en una residencia y solo salía a la terracita, que esto les ha dado la vida", comenta. Lo que más le gusta son los juegos de memoria y las manualidades, y no le hace tanta gracia hacer gimnasia. Pide las canciones de Harry Styles cuando hay sesiones musicales, porque ya está un poco harta de escuchar a Pantoja o a Manolo Escobar. "Por Custodio me sé todo Camarón", explica.

Conxita Palau utiliza el mando a distancia de su televisión para conectarse al Casal TV de Suara Cooperativa SIMÓN SÁNCHEZ Barcelona

Exigencia

En la pantalla de televisor que tiene en el salón aparecen todas sus compañeras, distribuidas como en una reunión de Zoom. Lo ideal es que haya máximo entre 10 y 15 personas, a repartir en varias salas digitales en las que se intercala la programación durante las tres horas matutinas y las tres horas diurnas. Estas sesiones están dirigidas por las trabajadoras de Suara, como Nuria Pérez, cuyo cargo se denomina facilitadora.

Nuria observa a Conxita y se ríe de sus ocurrencias. Le mueve el afán de servicio y reconoce que hay exigencia por parte de las personas mayores. Nada de ser paternalistas o indulgentes, si algo no les gusta, "te lo dicen", asegura, así que la programación debe ser interesante y estimulante. "Son personas que se pueden quedar solas y siguen estando activas en su día a día", explica.

Dada la edad y circunstancias de las participantes, la organización cuenta con un protocolo de actuación si hay algún contratiempo durante las jornadas que comparten. En una ocasión, una señora tuvo un accidente y rápidamente llamó al servicio de emergencias, a la vez que desconectaba la cámara digital para preservar su intimidad y no alertar a las demás. 

El deporte, la política y la religión, y el catalán

Entonces, la coordinadora que está con los demás compañeros, llama la atención de Conxita. "¡Dicen por aquí que te vas a hacer famosa!", bromea ante esta entrevista inesperada que les ha dado un tema de conversación. Ella responde que se acordará de todos ellos y, continúa: "Hablamos de todo, a veces estás triste y te levantas con mal pie, o de la autoestima, porque primero hay que quererse a uno mismo para querer a los demás", afirma. 

Conxita Palau, usuaria de Casal TV de Suara Cooperativa, atiende a Crónica Global en su domicilio SIMÓN SÁNCHEZ Barcelona

Aquí, como en cualquier cena familiar, advierte de que no hay que tocar tres tópicos: política, fútbol y religión, ¡y la lengua! Reconoce que tiene genio, pero no se enfada, y si se expresa en catalán y protestan, cambia al castellano. Eso sí, asiste a todas las clases de catalán para fomentar su uso y ayudar en las dudas que haya a sus amigas, al igual que comparte su experiencia en los talleres de cocina o en las lecturas de libros que hacen en común.

Cuando su hijo, que vive en Sant Cugat, viene a comer con su familia los domingos, le cuenta lo que ha pasado durante la semana con anécdotas en las que incluye a sus amistades. Al fin y al cabo, este casal online es una forma de estrechar lazos y crear un nuevo modelo de envejecimiento que motive a las personas más mayores, tan aquejadas por la soledad no deseada. 

Nuevo modelo de envejecimiento

Al respecto, Àngels Cobo i Puig advierte de que, en Cataluña, más del 64% de las personas mayores manifiestan estar en una situación de soledad no deseada. "Este hecho impacta en su estado anímico, físico y de salud, y hay muchos ingresos en atención primaria a raíz de ello", sostiene. Una forma de prevenir este problema de salud pública es acrecentar y fomentar las relaciones en las edades más avanzadas. 

"No hay brecha digital", argumenta, y pone el ejemplo de una hija que le había comprado un móvil y una tablet a su madre. Esta señora mayor decidió que no quería utilizarlos, pero solo hasta que vio que sus compañeras usaban el grupo de Whatsapp para compartir mensajes, comentarios y quedar para una sesión online. ¡Cómo se lo iba a perder! 

"Ahora hay muchos motivos para levantarse de la cama", observa Cobo, ya que, en esta etapa, donde hay muchas horas ociosas, las motivaciones de antaño como el trabajo o el cuidado de los familiares han quedado relegadas. "Acompañar significa reconectar de nuevo con otras personas", mantiene, con las que compartir intereses, pasiones y hasta discusiones. 

Retos a superar

La directora de transformación digital apunta que hay retos a superar en el Casal TV, como la atención a las personas con sordera, a las que les cuesta seguir el hilo de las conversaciones que se producen en los grupos: "Buscaremos alternativas para ellos". En paralelo, subraya que reciben las peticiones de los usuarios, entre las que destaca la organización de sesiones nocturnas porque su sueño está alterado y, entre los temas propuestos, también quieren hablar de sexo.

Hay mil caminos a explorar, pero el propósito sigue siendo el mismo: "Trabajar el sentimiento de generar un grupo, y luego un espacio de actividad física, mental y de ocio", un ambiente que anime a aquellas personas que, por sus circunstancias, se encuentran solas y que con este recurso vivirán una nueva etapa. Al tanto, Suara ha medido el impacto que ha tenido el casal a través de la Escala UCLA de sensación de soledad. 

Más motivación

En una encuesta que realizaron de forma previa y al cabo de tres meses del uso del casal, se observa que, en la categoría de sentirse más acompañados, se pasó del 14% al 84,7%; en cuanto a practicar actividades mentales, creció del 0% al 71,4%; y las salidas que realizaban fuera de casa pasaron del 14,3% al 42%, "porque se sentían más motivados". Además, muchos de ellos comenzaron a planificar la hora de levantarse.

Cobo termina con una anécdota. En Suara, contaba con la ficha de un usuario en el que pedía expresamente que no le molestara ninguna trabajadora hasta las doce de la mañana, momento en el que se despertaba. "Ahora es el primero que llega a la sesión de las diez", comenta, contenta. Ahora, en su etapa de comercialización, esperan expandir la red por el resto de Cataluña y más allá.

Ángels Cobo i Puig, directora de la Oficina de Transformación Digital, en la sede de Suara Cooperativa. SIMÓN SÁNCHEZ Barcelona