Vídeo | Un 'story' de Instagram salva a un perro maltratado en Calaf

Nuevo éxito de la colaboración ciudadana. Las instituciones públicas han salvado del maltrato a un perro gracias a un vídeo ampliamente difundido a través de las redes sociales con el que se descubrió a un hombre pegando a su pastor belga en las inmediaciones de la estación de trenes de Calaf.

Tras conocer y documentar el caso, el Seprona de la Guardia Civil, con base en Manresa, inició las investigaciones pertinentes para verificar los hechos y localizar al responsable. Conjuntamente con el ayuntamiento, encontraron al presunto autor de los hechos y le retiraron al animal, que fue entregado a una protectora en Odena este miércoles.

El investigado, un ciudadano marroquí de 28 años, prestó declaración como presunto autor de un delito de maltrato animal, que contempla penas de prisión de hasta 18 meses, multas e inhabilitación para la tenencia de animales, especialmente si se acredita que las lesiones afectan gravemente a la salud del animal o es sometido a condiciones de abandono, explotación o violencia.

Duras imágenes

Las imágenes, viralizadas a través de los stories de Instagram, se grabaron este martes desde el interior de un tren de Rodalies y, en estas, se aprecia a un hombre pegando en reiteradas ocasiones a un perro tumbado en el suelo boca arriba, en señal de sumisión y confianza. Entonces, el propietario levanta al can estirándolo del cuello por el collar para seguir el paseo, pero se detiene unos metros más adelante para propinarle nuevos puñetazos en el morro, patadas en la barriga y golpes con la correa por todo el cuerpo.

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El perro reacciona tumbándose de inmediato, pero sus señales de miedo y obediencia son en vano para evitar que, finalmente, el hombre lo agarre por las patas delanteras y lo tire a un lado de la carretera. Las duras imágenes han conmocionado a este pueblo de 3.500 habitantes, que se ha volcado en identificar y localizar al hombre.

Colaboración ciudadana

Con el perro fuera de peligro, el consistorio ha agradecido la colaboración ciudadana: "Fue clave para detectar y frenar esta situación", han asegurado en un comunicado en el que también ha animado a la población a denunciar cualquier caso de maltrato animal.

Se da la casualidad que el perro es históricamente la insignia de Calaf, su arma parlante, y aparece en el centro del escudo del municipio.