En el banquillo de los acusados: Daniel Díaz (izquierda) y Sergio Gutiérrez (derecha) con una imagen de Valentín Morena

En el banquillo de los acusados: Daniel Díaz (izquierda) y Sergio Gutiérrez (derecha) con una imagen de Valentín Morena Crónica Global

Vida

¿Quién ordenó matar a Valentín Moreno? El sicario confiesa, el otro acusado se desmarca y el autor intelectual sigue sin nombre

Daniel Díaz reconoce haber disparado a Moreno y acusa a Sergio Gutiérrez de darle las órdenes. Gutiérrez lo desmiente y dice haber sido engañado

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La tensión y la incertidumbre marcan la primera sesión del juicio por el crimen de Valentín Moreno. Las versiones ofrecidas por los dos principales acusados no solo son contradictorias, sino diametralmente opuestas, lo que ha sumido la sala en un clima de confusión y expectativa.

Mientras Daniel Díaz Mora ha admitido sin rodeos ser el autor material del asesinato, alegando que actuó por orden de Sergio Gutiérrez, este último ha negado tajantemente cualquier implicación y, aún más, asegura no conocer “de nada” al presunto sicario.

La distancia entre sus relatos no puede ser más extrema. Por un lado, Díaz Mora, colombiano, ha reconocido que disparó a Valentín Moreno por la espalda. Señalando a Gutiérrez como el intermediario clave y supuesto cooperador necesario en el crimen.

Por otro lado, Sergio Gutiérrez, el segundo acusado, ha ofrecido una versión totalmente distinta: asegura que fue engañado y que, lejos de participar en el asesinato, creía estar colaborando con un grupo de colombianos en un asunto vinculado al narcotráfico. Niega rotundamente haber tenido conocimiento del homicidio o haber mantenido relación alguna con Díaz.

En el banquillo de los acusados: Daniel Díaz Mora (izquierda) y Sergio Gutiérrez Martín (derecha) entre dos agentes de los Mossos d'Esquadra

En el banquillo de los acusados: Daniel Díaz Mora (izquierda) y Sergio Gutiérrez Martín (derecha) entre dos agentes de los Mossos d'Esquadra Crónica Global

Seguimientos por una deuda de dinero

De este modo, Daniel Díaz Mora, el hombre acusado de asesinar a Valentín Moreno, ha reconocido ante el tribunal y los miembros del jurado que fue él quien le disparó en la nuca, la tarde del 18 de noviembre de 2021.

Durante su declaración ha explicado que un amigo suyo de la infancia, Alexander, le contactó a principios de noviembre de ese año para realizar “un trabajo” en España. Según su versión, Alexander le propuso realizar un seguimiento a una persona a cambio de 5.000 euros, además de cubrir los gastos del viaje. Aceptando, dice, por necesidad económica.

Viajó de Medellín a Barcelona, donde se alojó junto a Alexander en un piso cercano a la Sagrada Familia. Al día siguiente de su llegada, ambos conocieron a Sergio Gutiérrez quien les explicó que debían seguir a un individuo por una supuesta deuda de dinero. Ese individuo era Valentín Moreno. Según Díaz Mora, nunca se le habló directamente de un asesinato, sino únicamente de realizar un seguimiento.

Monitorizaron la vida de Moreno

Según su versión, Sergio les condujo hasta la casa de Moreno, así como al gimnasio y los bares que frecuentaba. Tras conocer los lugares de referencia del objetivo se iniciaron las vigilancias.

Para evitar levantar sospechas, utilizaron patinetes eléctricos alquilados con un documento de identidad robado, facilitado por Sergio. Fue así como, según su relato de los hechos, Daniel y Alexander monitorearon los movimientos diarios de Moreno mientras iban reportando la información recibida.

Valentín Moreno, en círculo rojo, con el resto del equipo del Sant Adrià CF

Valentín Moreno, en círculo rojo, con el resto del equipo del Sant Adrià CF Cedida

"Le hago un disparo en la cabeza"

Sin embargo, la tarde del 18 de noviembre de 2021, lo que comenzó como una tarea de vigilancia derivó en una ejecución. Según su testimonio, Alexander lo citó cerca del bar que frecuentaba la víctima. En ese momento, y bajo amenazas contra su familia, Díaz Mora accedió a participar en el asesinato.

Recibió un maletín con una pistola cargada con silenciador, se subió a una bicicleta y siguió a Valentín durante varias calles. Cuando este salió de su coche, le disparó por la espalda, directamente en la nuca.

Le hago un disparo en la cabeza”, ha reconocido. Tras el crimen, Alexander lo recogió en una motocicleta y se encargó de deshacerse del arma. Ambos se dirigieron a un punto donde los esperaba Sergio, visiblemente alterado. Al día siguiente volvieron a Medellín con unos billetes que ya tenían comprados previamente.

Valentín Moreno, el homicida de la Vila Olímpica, durante un juicio

Valentín Moreno, el homicida de la Vila Olímpica, durante un juicio EFE

La versión del presunto cooperador

A continuación ha sido el turno de Sergio Gutiérrez. Visiblemente nervioso, ha comenzado su declaración asegurando que no conoce “de nada” a Daniel Díaz Mora, a quien afirma no haber visto en su vida. En tono tajante, ha acusado al otro procesado de mentir deliberadamente para obtener un pacto con la Fiscalía, que —según ha confirmado— también le ofrecieron a él. Sin embargo, Gutiérrez asegura que no puede aceptar un acuerdo porque no puede admitir un crimen que no ha cometido.

En su lugar, ha ofrecido una versión completamente distinta de su implicación en los hechos, una que —según dice— tiene su origen en un asunto relacionado con el narcotráfico.

Según su testimonio, tras salir de prisión por una condena vinculada al tráfico de drogas, se puso en contacto con Cristian Rus, con la intención de volver a buscarse la vida en el mundo de la droga. Rus le prometió que hablaría con Javier Gómez, alias Javidubi, para ver si podía echarle una mano.

Dos presuntos colombianos narcos

Poco después, Cristian Rus le presentó a Gómez, quien se había hecho muy popular por su vinculación con los Boixos Nois. Fue entonces cuando Javidubi le comentó que dos colombianos “muy potentes” iban a llegar a Barcelona por un negocio de narcotráfico, concretamente para controlar una carga en el Puerto de la ciudad. Su función, según declaró, se limitaría exclusivamente a buscarles alojamiento.

Así, consiguió un piso turístico en las inmediaciones de la Sagrada Familia, donde se instalarían los supuestos colombianos. Javidubi, quien según Gutiérrez no tenía un rol operativo en el envío, pero sí interés en que todo saliera bien, le advirtió que los recién llegados venían “a controlar el terreno” y a supervisar la llegada de un contenedor.

A principios de noviembre, recibió un mensaje: “Ha llegado uno de los colombianos”, le advirtió Javidubi. Quedaron en un bar cercano al piso. Allí, según relató, estaban ya presentes Alexander —la misma persona que Díaz Mora señala como quien le propuso el crimen— y Javi. Gutiérrez llegó algo más tarde. Durante el encuentro, conversaron con discreción sobre temas de “carga y distribución”, sin entrar en detalles.

Luego lo acompañó al piso de Sagrada Familia y les ayudó a encontrar un coche con el que moverse por la ciudad.

El abogado señala a 'Javidubi'

Previamente, durante la intervención de su abogado defensor, este ha recalcado que su cliente no tenía ningún conflicto personal con Valentín Moreno ni interés alguno en su muerte. Sin embargo, ha señalado que sí había al menos dos personas que podrían haber tenido motivos: Cristian Rus y Javier Gómez, Javidubi.

El letrado ha insinuado que ambos, que en el pasado habían sido íntimo de Moreno, podrían haber estado más implicados de lo que hasta ahora se ha podido acreditar en el proceso. Tanto Rus como Gómez están citados a declarar este viernes en calidad de testigos.