La Policía Nacional ha detenido en la provincia de Girona a uno de los fugitivos más buscados en Europa, reclamado por las autoridades de Hungría y Rumanía por los delitos de homicidio agravado y contra la seguridad vial. El investigado residía en la localidad de Riudarnes, en una zona alejada del núcleo urbano y con poco trasiego de personas. Sin embargo, fue arrestado hace una semana en la localidad vecina de Santa Coloma de Farners.
Los agentes tuvieron que hacerse pasar por operarios de mantenimiento de parques y jardines para poder conocer su rutina, identificarlo y detenerlo. Según han informado fuentes policiales, se trata de Viorel Nae, alias Jaga, de 57 años, y se enfrenta a una petición de cárcel de cadena perpetua por asesinar a un sacerdote y torturar a una monja en la localidad húngara de Paloznak.
Un robo que acabó en homicidio
Los hechos por lo que estaba reclamado ocurrieron en agosto de 1991. Durante la noche del 26 de agosto, el investigado irrumpió, junto con otras personas, en una parroquia de Paloznak para robar los objetos de valor que se encontraran allí. En el trascurso del asalto, Nae y el resto de los sospechosos sorprendieron al sacerdote de la parroquia y lo ataron a una silla donde fue agredido con un palo de hierro.
También maniataron y agredieron a una monja de avanzada edad, hasta que confesó dónde se encontraban los objetos de valor y el dinero. La mujer logró sobrevivir a la agresión, aunque le produjo lesiones muy graves.
Los ladrones se llevaron una pequeña cantidad de dinero en efectivo y una cámara de vídeo. Durante la investigación, la monja explicó a la policía de Hungría que los atacantes hablaban entre sí en otro idioma. Con el avance de las gestiones, y gracias al cotejo de una huella dactilar encontrada en el lugar a los hechos, se obtuvo una coincidencia que permitió identificar y detener a uno de los implicados, quien terminó confesando su participación en el homicidio.
De los más buscados de Europa
El caso quedó cerrado hasta que hace un año la policía reabrió la investigación ante el hallazgo de nuevas pruebas. Fue entonces cuando descubrieron la supuesta participación del rumano Viorel Nae, el Jaga: un individuo considerado extremadamente peligroso. Según las autoridades húngaras, Nae llevaba en paradero desconocido desde el año 2021.
Desde entonces, figuraba en la lista de fugitivos más buscados de Europol, la 'Europe's Most Wanted Fugitives' y sobre él pesaban dos órdenes europeas de detención y entrega emitidas por Hungría y Rumanía.
Breve estancia en Huelva
Tras recibir la información del caso, la Policía Nacional acreditó su paso temporal por la provincia de Huelva. El hombre tomaba muchas medidas de seguridad, por ejemplo: no establecía residencias continuadas en un mismo lugar y se valía de identidades falsas para no ser identificado. También tomaba precauciones a la hora de contactar por teléfono con terceras personas, usando aplicaciones que evitaban la conexión con antenas telefónicas.
Hace unos días los investigadores lograron ubicarlo en la provincia de Girona y establecieron un dispositivo de detención en los alrededores de su posible domicilio. Para evitar que se sintiera observado, los agentes se hicieron pasar por operarios de mantenimiento de parques y jardines. De esta forma, cuando el fugado salió a la vía pública, los policías pudieron reconocerlo y proceder a su detención.