Decenas de amigos y familiares de I.R., uno de los cuatro detenidos por asaltar una tienda de ropa en Terrassa (Barcelona), le esperaban esta semana a las puertas del centro penitenciario de Can Brians (Sant Esteve Sesrovires). A pesar de su largo currículum delincuencial, este joven salió en libertad provisional, después de pasar quince días entre rejas por los hechos sucedidos en la capital del Vallès Occidental.
Sus amigos y familiares, entre elogios y abrazos, recibieron al joven con fuegos artificiales y luego publicaron todo este contenido en sus redes sociales. Una muestra de la impunidad que sienten estos jóvenes y que ha molestado con creces a los cuerpos policiales, en especial, porque, durante la huida de estos ladrones, siete agentes de la Policía Local de Terrassa resultaron heridos.
Botín valorado en 37.384 euros
Los hechos sucedieron la noche del pasado jueves 10 de octubre, cuando un grupo de ladrones, entre los que se encontraba I.R., asaltaron una céntrica tienda de ropa, sita en la calle Gavatxons de Terrassa. Los asaltantes destrozaron el aparador mediante un alunizaje y huyeron con un Seat León de color amarillo con el botín bajo el brazo. En tan solo cinco minutos fueron capaces de vaciar las estanterías de la primera sala de la tienda y hacerse con varias piezas valoradas en 37.384 euros.
Entre los objetos robados se encuentran chaquetas, pantalones y jerséis de marca, que lograron meter en el coche y huir antes de que los agentes se presentaran en el local.
Persecución de película
El estruendo de los cristales alertó a los vecinos que llamaron al número de emergencias, a la par que el sistema de seguridad del establecimiento emitía un segundo aviso. De inmediato, varias patrullas de la Policía Municipal de la ciudad y de los Mossos d'Esquadra iniciaron una persecución de película.
El Seat, tratando de esquivar los coches policiales, se incorporó a la autopista, dirección Sabadell, donde fueron interceptados, prácticamente en mitad de la carretera. Sin embargo, antes de poder detener a los cuatro sospechosos, siete agentes resultaron heridos. Los implicados acumulan numerosos antecedentes penales y 66 detenciones.
Decepción entre los cuerpos policiales
Tras la puesta en libertad y la publicación de la hazaña en redes sociales, varias fuentes policiales han trasladado a Crónica Global su decepción con el sistema. Lamentan qué más tiene que pasar para que los delincuentes permanezcan en prisión y no salgan en libertad pocos días después de cometer asaltos de esta magnitud. En esta caso, a los detenidos se les acusa de los presuntos delitos de robo con fuerza, daños, lesiones y atentado a la autoridad.