Dos versiones contrapuestas. Los testigos de la pelea del empresario Jordi Puig, hermano del exconseller Felip Puig, en un restaurante de lujo de Turó Park de Barcelona el viernes hablan de "gratuidad del ataque". Él, a su vez, lo rechaza y asegura que "le patearon la muleta y se marchó tranquilamente, pagando la cuenta". 

Desde el anonimato, un testigo del incidente que protagonizó el directivo, en un bufé de los aledaños del elegante parque, es contundente: "Él iba puro en mano, el grupo con el que comía insultó y lanzó al menos dos copas de alcohol a los comensales de la mesa de al lado". 

Fue, sostiene la misma fuente, con "una violencia gratuita tras una pequeña discusión por el humo del puro que se fumaba Puig". El hombre y las dos mujeres con las que iba no se lo tomaron bien "y reaccionaron de forma muy agresiva". 

Terraza concurrida

El encontronazo ocurrió el mediodía del viernes en un conocidísimo restaurante de Turó Park de la Ciudad Condal. El resto de clientes, vecinos VIP y empresarios, "quedaron estupefactos", y no daban crédito cuando hubo gritos y se lanzaron las copas de alcohol sobre los otros comensales.

Mucho menos al ver que uno de los protagonistas del choque era el empresario hermano del exconseller Puig. Un patricio no solamente cercano a la familia del expresident Jordi Pujol, sino exsocio del primogénito. 

Puig, airado, se defiende: "Me chutaron la muleta"

Furioso por el hecho de que la noticia haya trascendido, el empresario se ha dirigido a este medio para aportar su versión. Admite que fumaba un puro en la terraza, y ello provocó "incomodidad" a otros comensales. 

Aunque sostiene que fueron estos los que le recriminaron que les llegara el humo. "Fueron muy maleducados y groseros, y en un momento dado me patearon una de las dos muletas que llevaba", se queja. 

"Pagué la cuenta y me fui: no me han vetado"

Puig asegura que "pagó la cuenta como es debido" y se fue. "Los camareros se disculparon conmigo y en ningún caso me han vetado, como se ha dicho", ha añadido. 

Oriol Puig (i), Jordi Puig (c) y su hermano, Felip (d) FOTOMONTAJE CG null

Asimismo, Jordi Puig ha amenazado con tomar acciones legales contra el local y contra este medio por reportar la información. Asegura que la trifulca "se entromete en su honor". 

Restaurante: "Es un asunto privado"

Dirigiéndose a Crónica Global, la propiedad del local de lujo ha circunscrito la pelea a "un asunto privado y personal entre clientes". El establecimiento, decano en la zona alta de Barcelona, "ni tiene posición ni quiere inmiscuirse".

Ellos, indican, se dedican a "dar un buen servicio a todo el mundo, sin excepción, trabajando la hostelería, que es un sector ya muy difícil de por sí" en Barcelona. 

"Se le hace pagar su condición de amigo de los Pujol"

Su pareja, también hablando con este medio, ha apoyado la versión de su compañero sentimental, alegando que "se le hace pagar la condición de persona próxima a la familia Pujol". 

Jordi Pujol Ferrusola, exsocio de Jordi Puig EFE null

En el mismo sentido, la ciudadana recuerda que Jordi Puig "acababa de someterse a una operación e iba con muletas, por lo que era absolutamente imposible que se metiera en pelea alguna". 

Exsocio de Júnior, el hijo del 'expresident' Pujol

Cabe recordar que Jordi Puig es uno de los tres hermanos Puig. Felip entró en política como diputado de CiU y consejero en los gobiernos de Jordi Pujol y Artur Mas. En los gabinetes de este último saltó a los titulares cuando ocupó el título de consejero de Interior, entre 2010 y 2012. Él, por su parte, se dedicó al sector privado. 

La Unidad de Delincuencia Económica y Fiscal (Udef) le investigó por ser socio de Jordi Pujol Ferrusola en Iberoamericana de Business and Marketing SL, una mercantil situada en el icónico despacho de Ganduxer número 5, no lejos de la zona del incidente del viernes. Pero la justicia archivó una causa por blanqueo de capitales

Juicio por estafa: "Está archivado", defiende él

En 2022, sí se juzgó a Jordi Puig por otra causa: una presunta estafa de 250.000 euros en un negocio de la venta de una nave industrial con valor de casi 700.000 euros en Vilanova i la Geltrú (Barcelona). 

La transacción se vehiculó por medio de la sociedad Working Succesfully SL. El empresario negó ante el juez que cometiera fraude alguno. Hoy mismo, tras el incidente de Turó Park, ha asegurado que esa causa "está archivada". 

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