El pueblo del interior de Cataluña donde puedes encontrar un casa de 107 metros cuadrados por 129.000€: aquí nació Puigdemont
Más allá del detalle político, el municipio es conocido por su legado medieval y por su entorno natural
10 septiembre, 2024 09:33Noticias relacionadas
El mercado inmobiliario está necesitado de oportunidades. El precio por metro cuadrado no deja de subir en las grandes ciudades, aunque tampoco se salvan ya las zonas periféricas y hasta algunos pueblos.
En Cataluña, la opción más fácil siempre ha sido salir de la provincia de Barcelona. La pregunta siempre es ¿a dónde? Girona se ha convertido en otra de las capitales catalanes donde la vivienda se ha vuelto imposible. La llegada del AVE y otros trenes de larga distancia han ayudado a ello.
El pueblo de Puigdemont
Hay una alternativa, los pueblos. Uno de ellos es Amer, conocido por ser el pueblo de Puigdemont. Allí, sus padres tienen una panadería-pastelería conocida por los locales, incluso antes de que su hijo se dedicara a la política. Desde que lo hace, tiene más fama.
Allí, a poco más de 25 kilómetros de Girona, los que quieren una vida más tranquila la encuentran. Además, con oportunidades inmobiliarias interesantes. Al menos, si se atiende a una oferta que se ha publicado en el portal Idealista.
Piso barato
Actualmente, en el centro del pueblo se encuentra disponible un piso de 107 metros cuadrados a un precio muy competitivo de 129.000 euros. Esta vivienda, situada en una calle tranquila y silenciosa, cuenta con tres habitaciones, un baño, una cocina independiente y un amplio salón-comedor con balcón.
Su chimenea y la doble orientación, que garantiza luminosidad durante todo el día, le aportan un encanto especial y hacen de este piso una excelente oportunidad para aquellos que buscan un hogar acogedor y con carácter. A pesar de encontrarse en buen estado, la propiedad ofrece la posibilidad de personalizarla y adaptarla a las necesidades y gustos del comprador, convirtiéndola en una opción atractiva tanto para familias como para inversores.
Dónde está
No es una mala opción. Amer está conectado en bus con Girona y de allí a Barcelona hay menos de 40 minutos en tren. Por eso, se ha convertido en un lugar ideal para quienes desean un cambio de vida o una inversión en un entorno natural y sereno, y bien conectado.
Se trata de un encantador municipio situado en el norte de la comarca de la Selva, rodeado de montañas y bosques. En realidad, está en medio de un valle que limita con la volcánica zona de la Garrotxa al norte y el Gironès al este, y cuenta con varias entidades y vecindarios, como la Costa de Santa Brígida y Lloret Salvatge, que aportan diversidad y riqueza a este lugar de gran belleza natural.
Cómo es Amer
Uno de los puntos más destacados de Amer es el imponente monasterio de la Edad Media que corona el municipio, alrededor del cual se ha desarrollado el núcleo urbano, manteniendo un aire auténticamente medieval que lo convierte en un destino especial para quienes buscan historia, tranquilidad y paisajes inigualables.
El casco histórico de Amer conserva todo también el encanto de un pueblo del medievo, con calles adoquinadas que serpentean hasta la Plaça de la Vila, una plaza cuadrada rodeada de porches donde hay varios bares y tiendas de toda la vida.
Qué ver
Este lugar no solo destaca por su arquitectura, sino también por sus tradiciones. La plaza es el lugar perfecto para celebrar las fiestas. Una de las más importantes se celebra cada 16 de agosto, cuando la plaza se llena de música y baile con la Sardana del Batlle, la única sardana de Cataluña y alrededores que se baila en espiral.
Otros puntos de interés de Amer son la iglesia de Santa Maria, de origen románico, y la majestuosa Torre de Rocasalva, monumentos que, junto a las edificaciones de la antigua ruta del carrilet que conectaba Girona con Olot, sumergen a los visitantes en la rica historia de la región.
Qué hacer
El atractivo de Amer se distingue también por su entorno natural y su calidad de vida. Este pequeño pueblo ofrece una tranquilidad inigualable, rodeado de montañas y cerca de la ermita de Santa Brígida, un lugar popular entre los escaladores y aficionados al parapente.
Además, la proximidad a la Vía Verde que conecta Girona y Olot facilita la práctica de actividades al aire libre como el senderismo y el ciclismo, haciendo de Amer un destino ideal para los amantes de la naturaleza y el deporte.