La Abadía de Montserrat inauguró la pasada noche el ciclo de actos de celebración de su Milenario, con un espectáculo audiovisual al que asistieron unas 600 personas de la sociedad civil y eclesiástica de Cataluña. 

Las celebraciones se extenderán durante los próximos 15 meses, hasta finales de 2025, cuando se cumplirán 1.000 años desde que el Abat Oliba consagró este templo en la montaña de Montserrat. 

Sociedad civil y eclesiástica

El acto inaugural incluyó diversas actuaciones musicales, así como un "videomapeo" y un espectáculo de drones acompañado por el canto del Virolai. A él acudieron del presidente de la Generalitat, Salvador Illa; el Prior de la Abadía, Bernat Juliol, que además ejerce como comisario de los actos del Milenario; y el Pare Abat del templo, Manel Gasch.

Del séquito de autoridades hasta el interior de la basílica también formaron parte el Cardenal Arzobispo de Barcelona, Juan José Omella; el presidente del Parlament, Josep Rull; la alcaldesa de Monistrol de Montserrat, Núria Carreras; y el obispo de Santfeliu de Llobregat, Agustí Cortés.

"El alma de Cataluña"

Durante su discurso en el interior del templo, Illa puso en valor la Abadía de Montserrat como "una parte muy importante del alma de Cataluña" y un referente para todos los habitantes del territorio, así como para las personas de todo el mundo que cada año peregrinan hasta el lugar.

La voluntad del templo es hacer partícipe a la sociedad y ser un nuevo punto de partida para encarar los próximos mil años de la Abadía de Montserrat.

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