ERC ha limpiado la unidad hospitalaria que dirigía un médico condenado por acoso machista antes de dejar la Consejería de Salud al PSC. Los republicanos dictaron a finales de julio la internalización del servicio de Medicina Hiperbárica del Hospital Moisès Broggi, que dirigía el polémico doctor Jordi Desola.
Lo detallan fuentes del sector recordando la "última internalización" que llevaron a cabo los independentistas antes de entregar la Consejería de Salud a Olga Pané, independiente por el PSC. Además de una política que pone colofón a su estrategia en Salud, la de priorizar lo público, la acción significa expulsar del hospital concertado al doctor Desola, muy cuestionado.
Condena por despido con acoso machista
La fuerza del exconseller Manel Balcells dio cuenta de ello en una escueta nota de prensa en julio [leer aquí]. Con ello, ERC cerró la política de internalizaciones que mostró en campos como la rehabilitación domiciliaria, el Hospital de La Seu d'Urgell (Lleida) o una residencia de mayores de DomusVi en Lleida.
Pero es que la historia tiene más enjundia, porque el jefe de la unidad internalizada in extremis, el doctor Jordi Desola, estaba condenado por despido improcedente con acoso machista vinculado, como explicó este medio.
"Le tocaba el pelo y regalaba zapatos"
Ocurrió cuando el doctor Desola prescindió de una auxiliar de enfermería a la que acarició el pelo, regaló zapatos y flores o llamaba por su nombre con el diminutivo "...eta".
Dos sentencias judiciales corroboraron la vulneración de derechos fundamentales que terminó con la sanitaria sufriendo depresión y ansiedad tan fuertes que precisaron de ingreso en una unidad psiquiátrica.
La oenegé de salvamento y el Máster en la UB
Pero es que hay más, porque la condena, firme, llegó a la oenegé DAN Europa, dedicada a la coordinación de emergencias, y en la que participaba Desola. Y a la Universidad de Barcelona (UB), en la que el doctor, una eminencia en su campo, impartía el máster de Medicina Subacuática.
Tras la publicación de un primer artículo por parte de Crónica Global, otras extrabajadoras contactaron con este medio para denunciar las situaciones de "abuso de poder" del facultativo.
Vox lo llevó al Parlament
El asunto escaló y se convirtió en una pequeña crisis política. Vox, de la mano de la diputada María García, lo llevó al Parlament para que se pronunciara el conseller de Salud, Manel Balcells.
La unidad de Medicina Hiperbárica, que anteriormente también había sido cuestionada por la Sindicatura de Cuentas, se puso en revisión, y finalmente se internalizó.