Faltaban pocos minutos para las once de la mañana cuando una patrulla de los Mossos d’Esquadra ha localizado, desorientado, a Álex, el presunto homicida de Bellcaire d’Empordà (Girona). Los agentes se lo han encontrado caminando por el arcén de la carretera a su paso por Albons, localidad vecina al pequeño pueblo en el que apenas seis horas antes ha acabado con la vida de su hijo, Ayax, de 5 años, a puñaladas y ha intentado lo mismo con su pareja sentimental y madre del menor, Astrid, de 29 años, a la que dejó malherida.
En el momento de la detención, Álex, de 27 años, todavía vestía la ropa de la empresa para la que trabajaba, ensangrentada. Cuando ha sido aprehendido por los agentes no ha opuesto resistencia y tampoco ha dicho nada sobre los motivos que lo han llevado a cometer el filicidio, exceptuando que “había perdido la cabeza”.
Tras ser arrestado, el joven ha sido trasladado a la comisaría de la policía catalana en La Bisbal d’Empordà (Girona), en la que ha permanecido hasta las seis de la tarde. Los Mossos d’Esquadra lo han trasladado entonces hasta el escenario del crimen para reconstruir los hechos.
“Parecían una familia feliz”
Según ha podido saber Crónica Global, la pareja, a la que los vecinos describen como “muy discreta”, estaba atravesando una crisis. Aun así, ni a sus allegados ni a la policía catalana no les consta ningún episodio violento anterior ni que hubiesen protagonizado incidente alguno, al menos en público. “Parecían una familia feliz”, expresan a preguntas de este medio los residentes de este pueblo de apenas 800 habitantes en el que “todo el mundo se conoce”. Precisamente por eso, el hermetismo sobre lo ocurrido es casi absoluto.
En la misma línea que los vecinos, el alcalde de la localidad, Josep Molinas, ha corroborado que los Servicios Sociales del Ayuntamiento de Bellcaire d’Empordà no tenían constancia de episodios de malos tratos, un extremo que ha apuntalado el Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC), que ha precisado que no figuran denuncias por violencia de género.
Álex atacó de madrugada
El caso ha sacudido a este tranquilo pueblo del Baix Empordà, donde se han decretado tres días de luto. “No os hacéis una idea de la consternación”, señalaba una vecina. “Estamos en estado de shock”, expresaba un conocido de Astrid, la madre del pequeño asesinado, que permanece ingresada en estado grave en el Hospital Josep Trueta de Girona, aunque no se teme por su vida.
De hecho, fue ella la que descubrió al niño malherido, después de que su pareja, Álex, accediera durante la madrugada a la vivienda en la que madre e hijo dormían. El presunto parricida, que ya no vivía en el número 6 de la calle Vell Ter, entró al domicilio y atacó primero al niño, al que asestó varias puñaladas y, después, a la madre, que se despertó y pudo defenderse del ataque con la navaja multiusos que todavía llevaba encima cuando fue arrestado por los Mossos.
La madre, grave
Aunque le dio tiempo de pedir ayuda a un vecino, el niño falleció a causa de las heridas sin que los sanitarios del Sistema de Emergencias Médicas (SEM) pudiesen hacer nada por salvarle la vida. La madre fue estabilizada y trasladada en estado grave hasta el Hospital de Girona, mientras que el padre del menor logró huir del lugar.
Hasta el lugar de los hechos se trasladó el Área de Investigación Criminal (AIC) de Mossos d’Esquadra de Girona, así como la comitiva judicial y la policía científica que estuvieron inspeccionando la escena del crimen durante toda la mañana. Tras el levantamiento del cadáver, instruido por el Juzgado de Instrucción 1 de La Bisbal, el cuerpo del menor ha sido trasladado al Instituto de Medicina Legal y Forense de Girona, donde se le practicará la autopsia.
El posible detonante: la separación
Para la criminóloga y abogada Paz Velasco de la Fuente todavía es muy precipitado hablar de un nuevo caso de violencia vicaria. Especialmente, porque todo parece indicar que el sospechoso, tras atacar al pequeño, también tenía intenciones de acabar con la vida de su pareja. No obstante, Velasco de la Fuente aprecia que “no es aleatorio” que haya atacado primero a su hijo: “Así se asegura que, si no puede culminar la muerte de su mujer, ella sufrirá el resto de su vida”.
Además, analiza la experta, el hecho de que Álex y Astrid estuviesen en trámites de separación podría haber sido el detonante. “Aquí entran en juego varias variables, pero la voluntad de la mujer de acabar con la relación podría haber motivado al sospechoso a cometer el crimen”, explica. “Ante este tipo de situaciones, muchos hombres sienten miedo de perder a sus mujeres y que, paralelamente, otros hombres críen a sus hijos”, añade.
Según la criminóloga, la dependencia emocional, el miedo a la soledad o el miedo al qué dirán tras la separación, además del sentimiento de posesión sobre ambos (pareja e hijo) podrían ser las emociones que han conducido al joven a apuñalar al pequeño Ayax y a su compañera a altas horas de la madrugada.
Intención de hacer daño
Asimismo, el hecho de que los haya atacado cuando la mujer y el niño dormían demuestra la clara intención de hacer daño y minimizar las posibilidades de que las víctimas se pudieran defender, “especialmente, el niño”, matiza la experta. Por lo tanto, estaríamos ante un homicidio o asesinato con alevosía, concreta.
Paralelamente, Velasco de la Fuente aprecia que debería saberse si el detenido había consumido drogas antes de perpetrar el crimen, pues de ser así, y demostrarse que tenía su capacidad cognitiva alterada, podría beneficiarse de una atenuante. De hecho, la presunta drogadicción de Álex sería uno de los motivos que habrían conducido a Astrid a querer separarse del padre de su hijo.
Tras la primera reconstrucción de los hechos, Álex ha sido trasladado de nuevo a dependencias de los Mossos d'Esquadra donde pasará la noche antes de ser puesto a disposición judicial. La investigación se encuentra bajo secreto de sumario y la policía catalana, como corresponde en estos casos, ha declinado ofrecer más detalles. Un hermetismo al que también se acogen los vecinos de Bellcaire, que tardarán varios días en digerir la tragedia y poder recuperar su actividad cotidiana.