La Generalitat confirma que Cataluña sigue en emergencia por sequía a pesar de las lluvias de marzo
- El consejero de Acción Climática, David Mascort, justifica que no levantará las restricciones vigentes para volverlas a aplicar en pocas semanas
- El mínimo para pasar página a la situación actual es que las cuencas internas lleguen al 27% de su capacidad
Noticias relacionadas
- Las lluvias solo mejoran un 0,05% las cuencas internas: se mantienen las restricciones por sequía
- Las lluvias de los últimos días, insuficientes en Cataluña: los pantanos, a apenas el 16% de capacidad
- El Govern aún presume de su gestión de la sequía pese a la falta de inversiones
- El Govern destinará 50 millones de euros adicionales a compensar las pérdidas del sector primario por la sequía
El Govern mantendrá sin cambiar un ápice las restricciones por la emergencia por sequía que ya se aplican en el grueso de Cataluña. El consejero de Acción Climática, David Mascort, ha confirmado que las lluvias de marzo no han sido suficientes para superar la situación de excepcionalidad hídrica y que todas las medidas de ahorro de agua que están vigentes en Barcelona y Girona continúan.
Los embalses de las cuencas internas están por ahora al 16% de su capacidad, el límite que la Generalitat fija para entrar en la fase 1 de emergencia por sequía. Según Mascort, “no tendría sentido” levantar las medidas para aplicarlas de nuevo en cuestión de semanas.
Para superar las restricciones actuales, los embalses deberían “llegar a un porcentaje similar al del año pasado”. Es decir, al 27% de su capacidad total.
Alargar las nuevas restricciones
Las lluvias de marzo no han sido del todo inocuas. Mascort ha manifestado que las precipitaciones propiciarán que Cataluña entre más tarde en la fase 2 de emergencia por sequía, un estadio con restricciones más duras que también afectaría al grueso de la población. Básicamente, a la de Barcelona y su área metropolitana y Girona.
Según la valoración del consejero, si en abril y mayo se dan nuevos episodios de precipitación “lo más seguro es que no entremos en emergencia 2 en verano”. Cataluña aún no contará con suficientes recursos hídricos, pero se gana tiempo para llegar a los momentos más complicados.
Barcos con agua, la solución de Aragonès
Para este momento, la propuesta que el Govern en funciones aún mantiene vigente es la de fletar barcos con agua potable. La Agencia Catalana del Agua (ACA) ha movilizado recursos extraordinarios para reparar fugas de agua históricas localizadas en municipios de las zonas más tensionadas por la falta de recursos y que llevaban años sin reparar. Parte de estos trabajos no resolverán la situación hasta el medio plazo. No sirven para la situación de emergencia actual.
Lo mismo ocurre con la ampliación de la desaladora de Corbera. Se empiezan a proyectar las obras, pero no será una solución para el episodio de sequía actual. Ante esta realidad, los colegios de ingenieros insisten en la necesidad de ejecutar el minitrasvase de agua desde el Ebro, una cuenca que este ejercicio tiene excedencia de recursos.
El Govern en funciones cerró la puerta a esta alternativa antes de la convocatoria electoral. Su gestión de la sequía es una de las cuestiones que se critican a Pere Aragonès, que tendrá que encajar críticas en este sentido durante la campaña. De hecho, PSC ya ha pedido que el consejero Mascort comparezca de forma urgente frente a la Diputación Permanente del Parlament para explicar las novedades de la situación.
El pantano de Darnius, el que tiene las reservas más bajas
El panorama no es optimista. Ha llovido en las últimas semanas, sí, pero Cataluña aún necesita muchas más precipitaciones. El propio consejero de Acción Climática ha advertido a los agricultores que dependen del pantano de Darnius, situado a pocos kilómetros de La Jonquera (Girona), de que este verano lo más probable es que no puedan usar agua.
A la población de la zona sí que se le garantiza el agua de boca, pero se deja en el aire las restricciones de los próximos meses. Los pueblos del norte de Girona son los que concentran los problemas más graves de sequía.