El Beach Club, que buscaba reabrir como burdel para mujeres
Naufraga en Barcelona el primer prostíbulo de España para mujeres
- Beach Club, que tenía que abrir como burdel solo para ellas en la Ciudad Condal, acaba en traspaso
- El negocio buscaba responder a la 'ley del sí es sí'
No habrá primer club de alterne para mujeres en España. El Beach Club Barcelona, en el que había un proyecto para abrir como strip club solo para ellas, ha terminado en traspaso. Con ello, se liquida la idea de abrir un negocio de compañía para féminas, que hubiera sido el primero del país.
El fallido negocio estaba preparado para abrir en el Beach, una sala erótica situada en la calle Valencia, en pleno Eixample, que es propiedad de la comunidad china. Lo preparaban empresarios locales conocedores del sector, y de este modo querían protestar por la llamada ley del sí es sí, que persigue la publicidad de servicios sexuales.
En traspaso
No pasará. Al menos en este lugar, donde la discoteca con prestación sexual ha terminado en traspaso. Sus dueños, empresarios chinos, piden 700.000 euros más otros 2.400 de alquiler.
Interior del Beach Club, que buscaba abrir como burdel para mujeres
Un elevadísimo precio para un local de 300 metros cuadrados con dos entradas --una de ellas discretas-- en plena zona turística, y que presume de tatamis, hidromasaje y zonas privadas.
La inmobiliaria que pilota el traspaso, InmoOlaya, no ha querido comentar la operación. Otras fuentes del sector la han confirmado.
Taxistas y comunidad china
El fallido proyecto llega después de que Beach Club pasara por dos manos. A la de un grupo de personas vinculadas al mundo del taxi, primero, y a las de la comunidad china, después.
Tras ello, se aprobó la ley 10/2022 de garantía integral de la libertad sexual o ley del sí es sí, que ha golpeado la publicidad de prostitución y el ofrecimiento de servicios sexuales en general. De hecho, desde el sector ha salido una plataforma antiabolicionista.
Respuesta: prostíbulo para ellas
Ante el revés que provocó al sector la ley apadrinada por la exministra de Igualdad Irene Montero (Unidas Podemos), empresarios de la industria de Barcelona prepararon su respuesta: un club de compañía solo para mujeres, con escorts masculinos, baile en barra y música y bebida.
Interior del Beach Club, que quería ser el primer burdel para mujeres
Buscaban demostrar que los locales de alterne no eran rayanos a la explotación sexual. Pero el proyecto no ha cuajado, y Beach Club sigue cerrado busca ahora nuevo operador.
Los pisos, más afectados
En cualquier caso, un directivo del sector explica que la ley del sí es sí no ha supuesto el cierre de los locales de servicios sexuales. Por el contrario, el medio centenar de clubes "con reservados" de Barcelona, que retienen licencias históricas únicas en España, siguen operando y tienen más negocio que nunca.
Lo hacen por medio de memorandos de entendimiento con las escorts, a las que ofrecen trabajo por escrito --que ellas rechazan-- para subrayar el consentimiento de su trabajo. Por contra, la prostitución informal en los pisos sí ha sufrido más, pues el Gobierno ha atacado la publicidad de servicios sexuales on line.
Un prostíbulo en venta por 12 millones
Ejemplo de ese florecer del alterne pese a la ley del sí es sí es el traspado del Top Damas, un discreto prostíbulo en la zona de Sant Gervasi de Barcelona que se vendió por cerca de 12 millones de euros un año atrás, como explicó este medio.
El Damas salió al mercado a un estratosférico precio porque atesora una de las escasísimas licencias que legalizan su actividad en la capital catalana.
La Jonquera tuvo un prostíbulo gay
En cualquier caso, el (fallido) primer club de alterne para mujeres de Barcelona no es el primer intento de reinventar la prostitución en España. En 2015 abrió en la zona de La Jonquera (Girona) un prostíbulo gay para hombres homosexuales.
El Paradise, el club de alterne más famoso cerca de La Jonquera, en Girona
El Club Diamant, situado en el área donde operan auténticas fábricas de sexo como Paradise o Lady's Dallas, tuvo una corta vida y terminó cerrando meses después. Sus rivales para hombres heterosexuales continúan.
