Una agente en el Servicio de Atención a la Víctima de la comisaría de Nou Barris de la Guardia Urbana de Barcelona

Una agente en el Servicio de Atención a la Víctima de la comisaría de Nou Barris de la Guardia Urbana de Barcelona EUROPA PRESS

Vida

La Guardia Urbana atiende a 619 víctimas de violencia machista en ocho meses

El edificio de las Ramblas que antiguamente albergaba la comisaría de la GUB de Ciutat Vella se convierte en la primera dependencia de policía destinada en exclusiva a esta asistencia

16 diciembre, 2023 00:00

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El servicio de reciente creación para la atención integral a las víctimas de violencia machista de la Guardia Urbana de Barcelona ha efectuado más de 1.300 intervenciones en ocho meses, de las cuales 619 se han centrado en la asistencia de mujeres y niños. 

En la actualidad, la policía local de Barcelona dispone de dos oficinas de Servicio de Atención a la Víctima (SAV), una situada en las Ramblas, su “buque insignia”, y otra en la comisaría de Nou Barris.

Desde la entrada en funcionamiento del espacio de Nou Barris, en marzo de este año (el de Ciutat Vella echó a andar en agosto), el servicio ha realizado 1.382 intervenciones: 463 atenciones a mujeres víctimas de violencia machista, 156 asistencias a sus hijos, menores de edad, y 763 formaciones y asesoramientos a las patrullas para que sepan cómo actuar cuando se encuentren en estas situaciones.

Hace un año no podían recoger denuncias

Hasta finales de 2022, la Guardia Urbana de Barcelona, recuerdan fuentes consistoriales, no podía recoger denuncias por violencia machista, una competencia que hasta ese momento recaía únicamente sobre los Mossos d’Esquadra. “La situación era absurda, porque cuando llegaba una víctima a una de nuestras 10 comisarías la teníamos que derivar, con el riesgo de que no fuese a denunciar”, declaran las voces consultadas.

Una agente en la oficina del Servicio de Atención a la Víctima de la Guardia Urbana en Nou Barris

Una agente en la oficina del Servicio de Atención a la Víctima de la Guardia Urbana en Nou Barris GUARDIA URBANA DE BARCELONA

Así las cosas, y con un volumen alarmante de denuncias por violencia machista sobre los hombros de la policía autonómica, en noviembre del año pasado el Ayuntamiento de Barcelona y el Departamento de Interior firmaron un protocolo que daba carta blanca a la policía municipal para tomar y tramitar estas denuncias.

Eso sí, en caso de delito penal, seguirían siendo derivadas a Mossos d’Esquadra, cuerpo que seguiría asumiendo la investigación. “Ahora hay 10 sedes más en la ciudad a las que las mujeres pueden acudir para denunciar”, que se suman a las de sus compañeros de la policía catalana. 

Nou Barris y Ciutat Vella

La rúbrica de este protocolo, todavía bajo el mandato de Ada Colau, marcó la hoja de ruta que ha permitido a la Guardia Urbana abrir su propio Servicio de Atención a la Víctima, que depende de la Unidad de Investigación. La primera fue la oficina de Nou Barris, en marzo, porque la comisaría tiene una conexión directa, por el interior, con el Servicio de Atención y Recuperación a Víctimas de Violencia Machista (SARA), un recurso de titularidad municipal que ofrece atención ambulatoria específica a víctimas de situaciones de violencia machista, ya sean mujeres, niños y adolescentes, personas LGTBI o de su entorno próximo directamente afectadas.

Con el traslado de la comisaría de la GUB de Ciutat Vella de las Ramblas a la calle Tàpies el consistorio decidió entonces aprovechar las instalaciones policiales para instalar en segundo SAV, su “buque insignia” por la localización en la ciudad. Aunque se mantiene la oficina de recepción de denuncias, esta se ha convertido en la primera dependencia policial destinada exclusivamente a la atención de víctimas de violencia machista, si bien alberga también la Unidad Municipal contra la Trata de Seres humanos (UTEH). “Se eligió este lugar porque es muy céntrico y de fácil acceso”.

GUB y Mossos aúnan esfuerzos

Además de la atención a las víctimas, los agentes que forman parte de este servicio invierten parte de sus esfuerzos en formar a las patrullas que se puedan encontrar con estas situaciones. Así, han creado una guía de indicadores para detectar posibles casos de violencia de género en llamadas realizadas, aparentemente, por otras cuestiones. Los agentes llevan encima el formulario, que les ayuda a detectar estas situaciones. “Este método ha destapado muchos casos de violencia machista”, aseguran fuentes consistoriales. 

Además, los SAV cuentan con espacios adaptados para los niños y zonas amables pensadas para minimizar el impacto emocional de las víctimas a la hora de declarar. Más allá de estas obras de adaptación, las voces consultadas hacen hincapié en “la formación que reciben los agentes para atender a las mujeres y niños, que tienen una victimización muy específica”.

Espacio diseñado para minimizar el impacto emocional de los menores y de las mujeres durante su declaración

Espacio diseñado para minimizar el impacto emocional de los menores y de las mujeres durante su declaración GUARDIA URBANA DE BARCELONA

“Lo que se intenta desde Mossos d’Esquadra y Guardia Urbana de Barcelona es dar la mejor atención a la víctima, ya no sólo en el momento de la denuncia, que es muy importante, sino con una atención integral. Ahora, lo que hemos hecho con estos dos nuevos servicios es sumarnos a los recursos de los que ya dispone Mossos d’Esquadra”, explican. 

Un servicio premiado

La labor de estos SAV les ha valido el reconocimiento de la Delegación del Gobierno, que les ha otorgado el premio Meninas 2023 coincidiendo con el Día Internacional de la eliminación de la violencia contra las mujeres el pasado 25 de noviembre. Este premio destaca el compromiso tanto de los agentes del servicio como de la propia institución en la erradicación de la violencia machista. 

Desde el consistorio destacan la labor de este nuevo servicio y confirman que se está estudiando la apertura de nuevas oficinas en el futuro. “Ojalá pudiésemos decir que no abriremos más”, han aseverado, subrayando que la violencia de género sigue siendo una lacra en nuestra sociedad.