En Barcelona se roban cuatro relojes al día: los hurtos dejan 177 detenidos en cuatro meses

Junio fue un mes frenético, con 149 robos de relojes de baja, media y alta gama en la Ciudad Condal, lo que supone una media de casi cinco asaltos diarios. Solo en ese mes, la Guardia Urbana de Barcelona (GUB) y las unidades de seguridad ciudadana, el grupo Titani –especialista en este tipo de robos— y el Área de Investigación Criminal (AIC) de Mossos d’Esquadra arrestaron a 53 ladrones, un 39% más que en el mismo mes de año anterior, cuando fueron 38 los detenidos. Entre julio y septiembre, los arrestos de ambos cuerpos policiales se dispararon en un 90%, pasando de 93 en este periodo de 2022 a 177 en 2023. 

Junio, un mes frenético

Las fuentes de Mossos d’Esquadra consultadas por Crónica Global atribuyen este pico de denuncias al retorno del turismo tras la pandemia. “El regreso de los visitantes a Barcelona es la principal causa” sobre todo en la época estival, sostienen. De hecho, en los datos aportados a este medio se observa un descenso en el robo de relojes a medida que se acerca el ocaso del verano. En junio se registraron 149 denuncias, frente a las 142 de julio, las 110 de agosto y las 104 de septiembre. 

Por otro lado, relacionan el incremento de las detenciones con el trabajo transversal de los cuerpos policiales. En el caso de la policía autonómica, cuenta con una unidad especializada desde la primavera del año pasado bautizada como grupo Titani, que sólo se ocupa de este tipo de delitos y que trabaja codo con codo con los agentes uniformados que patrullan las calles y con la División de Investigación Criminal (DIC), encargada de investigar los delitos de receptación, inherente al del robo de relojes. También existe una estrecha colaboración con la Guardia Urbana. 

Multirreincidentes, itinerantes y grupos especializados

El perfil de los 505 detenidos en estos cuatro meses de 2023 es muy diverso, explican las mismas voces, así como el valor de los relojes robados. Los Mossos d’Esquadra clasifican a los relojeros en tres grandes grupos: delincuentes multirreincidentes, itinerantes y grupos criminales organizados.

Entre los primeros figuran oportunistas que han convertido la delincuencia local en su modus vivendi. “Roban cadenas, relojes, anillos, lo que pillan”, señalan las mismas voces. En el segundo grupo se enmarcan los itinerantes: sujetos que se desplazan hasta Barcelona con el único propósito de robar estas piezas. Desde Mossos d’Esquadra precisan que tienen una alta movilidad geográfica por toda Europa y que “aprovechan que aquí no tienen antecedentes” para actuar. Después de dar uno o dos golpes o de acumular alguna detención, se esfuman para continuar delinquiendo en otro país. “Les sale gratis”, denuncian desde el cuerpo. 

Los Mossos detienen a varios ladrones multirreincidentes en Barcelona, que a partir de ahora podrán cumplir penas de prisión de hasta 18 meses / MOSSOS

El último grupo engloba asociaciones criminales especializadas en el robo de relojes de lujo. A principios de año la policía autonómica comunicó que había observado un cambio en la tendencia de estas redes: si bien en un principio el robo de relojes de alta gama estaba liderado por el crimen organizado, estos grupos lo delegaron en los delincuentes locales, quienes asumen el riesgo de terminar en comisaría. De esta forma, el crimen organizado solo se encarga de la receptación, es decir, de comprar los relojes sustraídos a los delincuentes del lugar. 

Las tácticas

Sobre si los conocidos como relojeros emplean ahora más violencia, los Mossos d’Esquadra son cautos. Sostienen que entre las 505 denuncias recogidas en los últimos cuatro meses se han encontrado “de todo”: desde asaltos con extrema violencia perpetrados por varias personas para arrebatar una valiosa pieza a su propietario hasta el método de la mimosa, una táctica en la que muestran un falso afecto hacia las víctimas para conseguir su objetivo.