La Fiscalía pide 6 años de prisión para el rapero Morad por atacar a los Mossos con una Taser

La Fiscalía pide seis años de prisión para rapero Morad por atacar a unos agentes de la autoridad con una defensa Taser durante para evitar que lo detuviesen por saltarse el confinamiento el pasado 17 de julio de 2021.

Se le acusa de los delitos de atentado a la autoridad agravado con uso de arma, y tenencia de arma prohibida en concurso con un delito leve de lesiones.

Durante el toque de queda

En un escrito de acusación presentado al Juzgado de Instrucción número 3 de L'Hospitalet, la fiscal señala que, estando en vigor el toque de queda, agentes de los Mossos y de la Guardia Urbana de Hospitalet fueron enviados a patrullar por el barrio de la Florida para evitar posibles incumplimientos para hacer botellón, ha avanzado El Mundo.

Plaza de Los Bloques, en el barrio de la Florida, en L'Hospitalet de Llobregat Google street view

En un momento dado, alguien lanzó botellas de cristal contra los agentes en la plaza de Bloques de la Florida, al grito de "perros, hijos de puta". Según el escrito fiscal, un vecino ayudó a localizar. A los posibles autores, que se habían metido en un portal. Al llegar, los Mossos "encontraron al acusado huyendo por uno de los pasillos del rellano".

"Acorralado"

Se trataba de Morad quien, presuntamente, "hizo caso omiso" a los agentes y "al verse acorralado sin salida en el final del pasillo, con manifiesta indiferencia a la autoridad de la fuerza actuante sacó un dispositivo eléctrico de defensa o Taser, considerado arma prohibida, y poniéndolo en funcionamiento, lo empuñó contra los agentes, de forma intimidatoria”.

Una pistola eléctrica Mossos

Según el fiscal, "el acusado se abalanzó sobre ellos, intentando sobrepasarlos de forma que, con ánimo de menoscabar la integridad física de un agente, le dio una patada en la pierna". Con todo, los Mossos consiguieron reducirlo y detenerlo. La Fiscalía pide que indemnice con 350 euros al policía que agredió, provocándole lesiones en el tobillo y la rodilla y una multa de 3.650 euros, además de la pena de seis años de cárcel.