El tramo en el que prácticamente se ha cortado el flujo de agua en el Besòs / CG

El tramo en el que prácticamente se ha cortado el flujo de agua en el Besòs / CG

Vida

El río Besòs se queda sin agua: la sequía vacía el esperado grifo para Barcelona

La desembocadura se seca una semana despues de que Aragonès prometiera una inversión de 25 millones como última esperanza para abastecer el área metropolitana

20 abril, 2023 22:45

La sequía llega al Besòs. El agua ha dejado prácticamente de fluir en la desembocadura del río, en Sant Adrià (Barcelona), generando alarma entre los vecinos y dejando gran parte de la vegetación del delta sin riego.

El caudal se ha reducido drásticamente una semana después de que la Generalitat de Cataluña apuntara a este río como una de las grandes esperanzas para abastecer el área metropolitana. El president Pere Aragonès prometió una inversión de 25 millones para mejorar la captación de agua.

Así llega el río Besòs a su desembocadura en plena sequía / CG

Así llega el río Besòs a su desembocadura en plena sequía / CG

Sequedad e incendios

Se prevé que el proyecto anunciado finalice a finales de año o a principios del próximo y permitirá captar agua por primera vez directamente desde el río y no solo por vía subterránea. Una actuación que se espera que multiplique por cuatro la capacidad potabilizadora.

La sequedad actual de esta cuenca, unida a los episodios de fuertes vientos registrados en los últimos meses, también ha creado un ambiente de especial riesgo para la propagación de incendios, que ha aprovechado en reiteradas ocasiones en pirómano que anda suelto en Sant Adrià y que prendió las cañas de la orilla.

Incendio en la vegetación del río Besòs en Sant Adrià / PROTECCIÓN CIVIL SANT ADRIÀ

Incendio en la vegetación del río Besòs en Sant Adrià / PROTECCIÓN CIVIL SANT ADRIÀ

De desbordarse a secarse

El Besòs no es el único río bajo mínimos en un momento de emergencia por la sequía, con los embalses casi vacíos: el bajo nivel del Segre ha obligado a cerrar el riego a las cosechas de Urgell, muchas de las cuales se perderán.

El caudal actual del Besòs, que llega al mar casi extenuado, no es habitual. De hecho, en ocasiones se ha llegado a desbordar, como ocurrió en diferentes ocasiones en 2020, una de ellas a causa de la borrasca Gloria.