Una herramienta pionera determinará cuál es la terapia más adecuada para cada paciente con cáncer

Bautizada como QF-Pro, esta herramienta es capaz de analizar las biopsias determinando con alta precisión qué pacientes responderán al tratamiento del cáncer con inmunoterapia y cuáles no. La inmunoterapia, considerada la gran esperanza del tratamiento contra el cáncer, funciona solo en un pequeño porcentaje da pacientes. Además, es una terapia cara, tiene un coste de 200.000 euros. En este sentido, resulta de suma importancia identificar correctamente a aquellos enfermos a los que se la puede aplicar y a los que no.

Ahorrar dinero y efectos secundarios innecesarios

"Esta tecnología nos permite ver mucho más allá de lo que podemos ver con las técnicas actuales. Gracias a ella somos capaces de derivar al paciente a la terapia que sea más adecuada para él", explica a Crónica Global el CEO de Hawk Biosystems, Fernando Aguirre. Además de evitar toda una serie de efectos secundarios innecesarios a los enfermos, esta herramienta permitirá ahorrar mucho dinero a los sistemas de salud. "Estas terapias son carísimas y los sistemas de salud tienen problemas para permitírselas", añade.

La inmunoterapia consiste en una familia de tratamientos que "enseñan" al sistema inmune a matar células tumorales, sin importar lo avanzada que esté la enfermedad ni lo extensa que sea la metástasis causada por el cáncer. Sin embargo, poder predecir qué pacientes responderán positivamente a este tratamiento sigue siendo uno de los principales desafíos en la lucha contra la enfermedad. 

Ronda de financiación en Capital Cell

"Cuando las terapias inmunes en oncología funcionan, funcionan de maravilla, pero desgraciadamente funcionan en muy pocos pacientes y no se sabe por qué. Ahí es donde creemos que podemos ayudar", apunta Aguirre. Ahora, el objetivo de la biotecnológica es industrializar y certificar su nueva tecnología para que llegue a los hospitales y pueda beneficiar a los pacientes cuanto antes.

Para lograrlo, la compañía ha recibido un apoyo de 2,75 millones de euros por parte de la Agencia Española de Investigación, la Comisión Europea y el CDTI. Además, tiene abierta una ronda de financiación en Capital Cell, la primera plataforma de crowdfounding europea en el campo de la biomedicina, gracias a la que ya ha cerrado sun primera ronda de 800.000 euros.

Industrialización del producto

"La idea es industrializarla a finales de este año. Luego tendríamos que pasar por la fase regulatoria. Así que pensamos que QF-Pro podría llegar al mercado en dos o tres años". De momento, la tecnología ya ha sido validada clínicamente tras un estudio realizado con hospitales de España, Francia y Países Bajos, cuyos resultados saldrán publicados a mediados de febrero en la Journal of Clinical Oncology, la revista científica de mayor prestigio internacional en el campo de la oncología clínica.

Hawk Biosystems, con sede en Bilbao, inició su actividad en 2018 de la mano de científicos españoles y británicos. Entre sus fundadores destacan el conocido empresario catalán Antonio Parente --dueño de la biofarmacéutica barcelonesa GP Pharm--, Antonio Ferrer y su actual CEO, Fernando Aguirre.