La pandemia destruyó un 2% de las fundaciones catalanas
El sector social ejerce como palanca de empleo anticíclica durante las crisis económicas
10 octubre, 2022 13:06La pandemia ha tenido un impacto destructivo en el tejido catalán de entidades. Si entre 1996 y 2018, el número de fundaciones se multiplicó pasando de un millar a 2.667, en 2020 descendió hasta las 2.621, un 2% menos, según datos presentados hoy por la Coordinadora Catalana de Fundacions. Más allá de la creación de nuevas asociaciones en el último año, algunas tienen orígenes que se remontan a la edad media, como el Hospital de Sant Pau.
Eugènia Bieto, presidenta de la coordinadora, ha destacado que este descenso de 46 ONG es pequeño a nivel estadístico y que faltan datos post-Covid, aunque ha admitido que "han habido fundaciones que han desparacido" desde la crisis del coronavirus. Sin embargo, otras "se han fortalecido" por la llegada de ciertas inversiones: "Hemos notado en los últimos años que hay fundaciones relevantes que están aumentando el número de empleados", ha asegurado.
Una protección anticrisis
La beneficiencia emplea a 91.911 personas en Cataluña, con un crecimiento del 20% en este sector laboral en los últimos años de los que se tienen datos (2016-2019). Este tipo de ocupación supone el 2,6% del total de empleo del país. De hecho, desde la crisis de 2008, la demanda de mano de obra por parte de ONG no ha hecho más que crecer --hasta doblarse en la actualidad--, mientras que en el resto de sectores se perdieron puestos de trabajo durante los primeros años. "En momentos de crisis, en momentos en los que aumentan las demandas sociales, en los que no se pueden atender todas las peticiones, las fundaciones hacen un esfuerzo y dedican una parte importante de su capacidad económica a contratar más personas para poder atender estas necesidades", ha señalado Bieto.
En 2019, las fundaciones catalanas reunieron unos ingresos de 5.318 millones de euros, lo que supone un incremento de casi un 22% en cuatro años. El aumento se debe princiapalmente a su actividad "profesionalizada", es decir, la venta de productos y servicios con fines benéficos, aunque las subvenciones públicas también crecieron.
Más subvenciones
De hecho, las subvenciones representan el 73% de los ingresos de las entidades sociales, y proceden principalmente de la Generalitat. Según Bieto, las donaciones privadas son "el reto pendiente", ya que solo aportan el 27% de los fondos.
Silvina Vázquez, autora del estudi y responsable del Observatori de Fundacions, ha explicado la metodología y ha detallado que el informe somete a escrutinio la labor de las 2.000 fundaciones en Cataluña que rinden cuentas ante la Generalitat y no las cerca de 400 entidades con sede social en la comunidad pero que responden ante el Ministerio de Cultura. Solo las activas, que presentan cuentas a una u otra institución, pueden beneficiarse de ayudas.