Angela Dobrowolski, exmujer de Mainat / EUROPA PRESS

Angela Dobrowolski, exmujer de Mainat / EUROPA PRESS

Vida

Angela Dobrowolski, exmujer de Mainat, en busca y captura

La exesposa del productor televisivo mantiene que no ha quebrantado la orden de alejamiento y comunicación que le impuso el juez

17 marzo, 2022 14:58

La exesposa del productor de televisión Josep Maria Mainat, Angela Dobrowolski, se encuentra fugada. Así lo ha confirmado en una entrevista que ha concedido a La Vanguardia en la que asegura que está “en busca y captura”. El motivo sería el quebrantamiento de la orden de alejamiento y de la prohibición de comunicarse con su exmarido y con los dos hijos menores que tienen en común.

“Respeté las dos órdenes, no quebranté nada”, asegura Dobrowolski en un vídeo. Según su testimonio, la causa de la orden de busca y captura que pesa ahora sobre ella deriva de unos correos electrónicos y unos mensajes de Whatsapp que su actual pareja y una amiga enviaron a Mainat “porque creyeron que podrían mejorar la situación”.

Amenaza con suicidarse

Por este motivo, el pasado lunes, los Mossos d’Esquadra se presentaron en su casa para detenerla. Pero no lo hicieron. “No vengas a casa, van a detenerte”, le advirtió su actual pareja, lo que permitió a Dobrowolski librarse de ser arrestada.

“Estoy en busca y captura. Una vez más. ¿Qué cómo se vive así? Con terror”, explica la exmujer de Mainat, que asegura que esta vez no ha cometido ningún error. Por eso, dice, si fuera detenida de nuevo “no presentaría resistencia”. La estudiante de medicina, acusada de un presunto delito de asesinato en grado de tentativa contra su ahora exmarido, asegura que si regresa prisión acabará con su vida.  “Conozco el protocolo antisuicida en la cárcel. No quiero ni imaginarme volver a entrar entre esas paredes. Si la sociedad supiera lo que es…”, advierte.

Asume que la quebrantó antes

Angela Dobrowolski fue imputada después de que, presuntamente, intentara acabar con la vida de su entonces marido administrándole insulina para causarle un shock hipoglucémico. A causa de un primer quebrantamiento de la orden de alejamiento, cumplió seis meses de condena.

“Admito que cometí un error. Escalé la fachada del edificio. Lo hice, no porque esté loca, la motivación fue pasar un móvil. Mi único objetivo era comunicarme con mis hijos. Pensé que si lograba darles un móvil no podrían destrozar nuestro vínculo. Por eso lo hice, por tener el derecho de cualquier madre: hablar con sus hijos”, explica. Ahora, a la espera de la celebración del juicio, asegura que no ha cometido ningún error que pueda justificar “el dolor, la desesperación y el aislamiento” que está padeciendo.