La justicia decidirá sobre la “discriminación” a los niños sin vacunar en el ámbito escolar

Un total de 130 familias catalanas, junto a varios docentes, piden al Tribunal Superior de Justicia de Cataluña (TSJC) que suspendan cautelarmente el protocolo Covid en las escuelas. Padres y madres de diferentes lugares del territorio han apoyado un recurso contencioso administrativo presentado este martes ante el órgano judicial para eliminar las cuarentenas en los alumnos sin inmunizar y el uso de mascarilla en casos específicos dentro del aula.

El protocolo dictado por la Consejería de Educación dirigida por Josep González Cambray ha cambiado en las últimas semanas. Meses atrás se confinaba a toda la clase cuando se daba un caso positivo. Ahora, con la vacunación en menores en estado avanzado, tienen que darse cinco casos para que se produzca este aislamiento y, además, se diferencia entre los que han recibido el pinchazo y los que no. Por ello, este colectivo ha decidido pedir el fin de estas medidas al TSJC, por algo que consideran “discriminación” y que atenta contra sus “derechos fundamentales”.

Los casos negativos

El abogado Francesc Feliu analiza el caso por el que han recurrido al TSJC el protocolo de Educación, pidiendo que suspendan cautelarmente las medidas. En caso de no ser así optarán por el procedimiento de derechos fundamentales, que el alto tribunal prevé como un proceso de tramitación “más urgente y rápido que recorta plazos”. El letrado esgrime tres motivos para apelar a los magistrados de la sección tercera, que son, por otro lado, los que han apoyado en las últimas semanas todas las restricciones solicitadas por el Govern.

Padres entran con sus hijos en un colegio de Barcelona / DAVID ZORRAKINO - EUROPA PRESS

“Existe una discriminación respecto a los niños vacunados y los que no, especialmente cuando hay un caso positivo en el aula”, explica Feliu. Según el abogado, los menores sin inmunizar --sin importar la razón, en este caso-- aunque “den negativo en el test, deben confinarse siete días, frente a los vacunados en el mismo caso”. Por ello, en el recurso se especifica este “trato diferencial” como una de las “discriminaciones” asociadas a los pequeños por un hecho --el fármaco contra el Covid-- que, por otro lado, y como narra el colectivo, no es obligatorio.

Certificados de autorresponsabilidad y mascarillas

Feliu sitúa el segundo ámbito en los “documentos de autorresponsabilidad” que los padres deben firmar cuando no están de acuerdo con el confinamiento de su hijo sin vacunar, si tiene un test negativo y no presenta síntomas. En este caso, asegura que se crean ciertas reticencias de los centros tanto públicos como privados, que se incrementa en el caso del uso de la mascarilla cuando existe un certificado médico que dice que, por problemas de salud, el niño no puede llevarla.

“Los centros los colocan en aulas individuales y los mantienen apartados, aislados del resto de niños, porque la escolarización no se la pueden negar”, señala el abogado, en referencia a los menores que por razones de salud están exentos del uso del tapabocas. Para este supuesto, que ya se interpone a una normativa nacional y no autonómica, han presentado tres informes periciales ante el TSJC.

“En según qué casos puede provocarles problemas respiratorios llevar las mascarillas, además de dolores de cabeza e incluso psíquicos y de comunicación”, remarca Feliu. En estas ocasiones, pone como ejemplo el caso de las personas con autismo, que requieren de una interacción específica que, como han alertado algunos sindicatos, con mascarillas se bloquea en un alto porcentaje. Estas son los argumentos de estas familias que, sin ser negacionistas o declararse como tales, han recurrido las medidas en las escuelas de la Generalitat y el Gobierno.