Análisis de muestras para el estudio con madres lactantes / CCMA

Análisis de muestras para el estudio con madres lactantes / CCMA

Vida

La leche de las madres lactantes vacunadas presenta anticuerpos contra el coronavirus

Una investigación catalana cuenta con la participación de 31 mujeres que estaban en periodo de lactancia en el momento de ser inmunizadas

13 abril, 2021 12:19

Un estudio del Parc Sanitari Sant Joan de Déu ha demostrado que la leche de las madres lactantes que han recibido la vacuna de Pfizer cuenta con anticuerpos contra el coronavirus. Esta situación, según los investigadores, pone sobre la mesa la posibilidad de que las vacunas de ARNm (Pfizer y Moderna) puedan proteger a los recién nacidos del Covid-19.

El estudio ha recibido el nombre de LacCOVID, y ha sido coordinado por Erika Esteve Palau, médica adjunta del Hospital de Sant Boi, y por Vicens Díaz de Brito, jefe de Enfermedades Infecciosas del centro.

31 sanitarias madres

La idea de realizar este estudio surgió ante el hecho de que algunas sanitarias que estaban en periodo de lactancia cuando recibieron la vacuna no querían interrumpir el proceso. Todo a pesar de que las mujeres lactantes no se incluyen en los ensayos clínicos con las vacunas, por los riesgos que puede suponer. Sin embargo, se recomienda su administración (siempre con las de ARNm) cuando el riesgo de contagiarse supere a los potenciales impedimentos.

Las 31 madres que integran la muestra no han tenido Covid y con anterioridad a cada extracción de sangre y de leche durante el estudio se les hace una prueba para verificar que están libres del virus.

Resultados prometedores

El estudio aún no ha sido completado, aunque ya se conoce el comportamiento de 18 de las mujeres participantes. A ellas se les han sacado 52 muestras de sangre y leche materna, dos semanas después de la primera dosis y cuatro tras la segunda.

Al cotejar las muestras, se ha comprobado que los anticuerpos contra el Covid crecen de forma notable tras la segunda dosis. De la misma forma, los valores sanguíneos de inmunoglobulina G, que es un tipo de anticuerpo, van ligados con sus niveles en la leche de las madres. Este conjunto de evidencias abren la puerta a que las vacunas puedan generar protección en los recién nacidos sin causar ningún tipo de efecto adverso.