El Gobierno catalán recoge pruebas de reacciones adversas a la vacuna contra el Covid-19. La Agencia de Salud Pública de Cataluña (ASPCAT) centraliza incidencias con la inmunización administrada al personal sanitario, sobre todo con los preparados de Pfizer-BioNTech y AstraZeneca.
Lo han explicado fuentes del sector sanitario catalán, aportando pruebas de las aperturas de los expedientes que ha abierto Salud Pública por las llamadas RAV, reacciones adversas tras la administración del fármaco contra la infección que causa el virus SARS-CoV-2.
"Pfizer y AstraZeneca"
Preguntada por la cuestión, la portavocía de comunicación del Departamento catalán de Salud no ha contestado a las preguntas de este medio sobre el alcance de las RAV. Sí lo han hecho fuentes sindicales, que han asegurado que se trata de clínicas desarrolladas tras la administración de las vacunas de Pfizer y AstraZeneca.
"Se trata, sobre todo, de Pfizer, la que más ha recibido el personal sanitario. AstraZeneca se está inyectando ahora a los profesores y a los mayores de 55 años. La de Moderna apenas la hemos visto", han indicado las mismas voces.
Cataluña aspira al 40% antes de verano
La detección de las RAV que producen las vacunas contra el Covid-19, leves en su mayoría, no impide que Cataluña haya alcanzado la velocidad de crucero con la vacunación. La subdirectora general de Promoción de la Salud, Carmen Cabezas, avanzó ayer que el Govern aspira a que la región inmunice al 40% de su población antes del verano.
Por ahora y tras el personal sanitario y de residencias, la autonomía está inmunizando a profesores, mayores de 80 años y grandes dependientes.