Un equipo de científicos catalanes ha validado la teoría de que los gatos pueden contagiarse del Covid-19, pero no pueden transmitirlo a las personas. El estudio, publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences, se basa en el análisis del gato que murió presuntamente a causa del virus en España.
La investigación ha sido realizada por el IrsiCaixa, el Barcelona Supercomputing Center, el Centre de Recerca en Sanitat Animal (Cresa) del Institut de Recerca i Tecnologia Agroalimentàries (Irta) y el Hospital Veterinari Sant Mori de Badalona.
'Negrito' no murió por el Covid-19
Los investigadores aseguran que 'Negrito', el felino de cuatro años que convivía con una familia afectada por el coronavirus, no murió como consecuencia del patógeno. La confusión se produjo tras su positivo en una prueba PCR, pese a que la carga viral del animal era muy baja y residual.
La mascota sufrió una cardiomiopatía hipertrófica que le provocó dificultades respiratorias graves, pero en ningún caso se debieron al SARS-CoV-2. Como prueba adicional, se ha analizado la sangre de otro gato que vivía bajo el mismo techo, 'Whisky', en cuyo caso no se presentaron signos de la enfermedad.
Desarrollo de anticuerpos
Hasta el momento, ha habido pocos casos de infección de felinos en todo el mundo, y en este caso se ha hecho análisis de sangre a 'Negrito' y a otro gato que vivía en la misma casa, 'Whisky', que no tuvo signo de la enfermedad.
Los análisis muestran que ambos gatos habían desarrollado anticuerpos contra el coronavirus: "En ambos casos hemos detectado anticuerpos neutralizantes, que tienen la capacidad de unir el virus y bloquearlo", ha dicho el investigador del IrsiCaixa Julià Blanco, lo que demuestra que su sistema inmunitario puede hacer frente al Sars-CoV-2 y en estos casos en concreto protegerlos.
Los humanos no corren peligro
El IrsiCaixa analizó la secuencia genética del virus que tenía 'Negrito' y comprobó que "tiene un 99,9% de similitud con el virus del propietario que murió, lo que sugiere que el gato se infectó directamente a partir de los miembros de la familia", ha dicho el investigador Marc Noguera i Julián.
La investigadora del Irta-Cresa Júlia Vergara-Alert ha señalado que, teniendo en cuenta los pocos casos reportados de animales, los animales de compañía "juegan un papel negligible en la epidemiología": "Se trata de un caso de zoonosis reversa, en que los gatos son las víctimas colaterales sin que el virus les provoque problemas de salud", ha constatado Vergara-Alert