Así se preparan los camping para la reapertura

Madrid y Barcelona entran el lunes en la fase 1 y algunas zonas de España en la fase 2 de la desescalada, una situación que los camping catalanes ven con esperanza. Por el momento, algunos ya han abierto y el resto están preparándolo todo para cumplir con las normas establecidas en el Boletín Oficial del Estado (BOE) y acordada con entre la Secretaria de Estado de Turismo y el Instituto para la Calidad Turística Española (ICTE), una entidad público-privada. Las normas principales son: distanciamiento social y uso de mascarilla y gel hidroalcóholico. 

El presidente de la Asociación de Camping de la Costa Dorada y las Terres de l’Ebre, Joan Anton, las encuentra "razonables". Reconoce que en las primeras fases de la desescalada es sencillo aplicar la regulación. No afecta a la demanda ni a los usuarios porque el tránsito de gente es menor con la imposibilidad de desplazarse entre provincias. Pese a todo les gustaría que el paso de fases se pudiera acelerar.

Mascarillas y gel

Entre las medidas aprobadas por el Gobierno en estas fases iniciales, figura la no apertura de las zonas comunes, que hasta la fase 2 --a la que el lunes llegan la zona de la Costa Dorada y las Tierras del Ebro-- no pueden abrirse. Aun así tienen la capacidad limitada al 30%, cifra que asciende al 50% a partir de la fase 3. Además, desde un inicio y a lo largo de toda la temporada, la mascarilla será obligatoria en esas zonas, incluso en los baños, si no se puede guardar la distancia de dos metros entre personas. Todos los empleados irán equipados con los equipos necesarios para trabajar, aseguran.

Sobre el alojamiento, cada camping intenta tomar las medidas más apropiadas y adecuarlas a su espacio. Anton revela que hay espacios que con las caravanas y autocaravanas optan por dejar un espacio entre parcela y parcela. En el caso de los bungalós, se deja un periodo de 48 horas vacante entre una reserva y la siguiente para entrar a desinfectar, como prevé aplicar Vilanova Park.

La presidenta de la Federación Española de Campings (FEEC), Ana Beriain / EP

¿'Covid free'?

Estas limitaciones tendrán un impacto que puede perjudicar aún más la situación económica de algunos camping. Más parcelas vacías o el impedimento de reservar bungalós sin descanso repercutirán en los ingresos. “Aumentarán los gastos”, admiten, por lo que hay quien valora “si estas medidas pueden repercutir en el precio final de la estancia para el visitante”.

Sobre cómo garantizar que el camping sea un espacio libre de Covid-19, Vilanova Park ha ideado un mecanismo. “El cliente debe firmar un papel de consentimiento en el que acepta las nuevas normas y en el que se compromete a venir sin tener ningún síntoma”. ¿Cómo garantizarlo? Fuentes del camping indican que están estudiando la idoneidad y legalidad de hacer controles de temperatura. Anton, en cambio, sin criticarlo, duda de que ello sirva: “No podemos garantizar que el cliente no vuelva contagiado cada vez que realiza una salida”.

Una familia en un 'bungalow' de un camping de la Costa Dorada / EP

Garantías

Todos los espacios de acampada consultados aseguran que si se cumplen las normas de distanciamiento social e higiene, el riesgo quedará minimizado. Además “la oferta de camping tiene más bondades porque hay más espacio”, defiende Anton, ya que se trata de zonas abiertas donde se pueden respetar las distancias. Asimismo, adelantan que para salir airosos este 2020, ya hay quien plantea alargar la temporada hasta octubre e incluso hasta diciembre.

Con Madrid y Barcelona en la fase 1 de la desescalada, los camping empiezan a abrir y aplican ya diferentes campañas de seguridad. La Asociación de Campings Girona Costa Brava han lanzado el programa WeCare para ofrecer apoyo y ayuda a todos los que quieran garantizar la máxima protección a sus clientes. Los 55 camping de la Costa Dorada esperan recibir el sello Safe Tourism Certified que prepara el ICTE  a que garantiza a los turistas que cumplen con los protocolos de seguridad. 

Una familia en una parcela de un camping / EP

Cuarentena

Para poder seguir adelante, los negocios aseguran que es importante llegar cuanto antes a la fase 3 y a la llamada nueva normalidad para recibir a clientes autóctonos y del resto de Europa. “Es vital para nosotros”, asegura el presidente de la Asociación de Campings de la Costa Dorada y las Tierras del Ebro.

En función de la zona de Cataluña, el turista extranjero representa entre un 50 y un 70% de los usuarios de los camping, una cifra para nada menor. Por ello, el sector ha visto con recelo la medida aprobada por el Gobierno de obligar a los viajeros que lleguen a España a pasar una cuarentena de 14 días. “No entendemos la lógica”, afirma Anton. Lo único que esperan es que la Unión Europea permita el tránsito de personas en el interior del espacio Schengen.

Dudas y esperanza

De la misma opinión es el presidente de la Federación Catalana de Campings, Miquel Gotanegra, que remarca la importancia que tiene para el sector que se reabran las fronteras. “La ocupación de los que están abiertos es muy baja porque no puede haber movilidad entre provincias ni tenemos fronteras abiertas”, lamenta el directivo. “Con el turismo interno no es suficiente; el extranjero es esencial para el sector”, subraya Gotanegra. Un dato que constatan desde el Vilanova Park, donde aseguran que “el 75% de nuestro cliente es de fuera”.

Aun así, los responsables de estos alojamientos turísticos se muestran optimistas. Anton da por hecho que, pese a que la temporada baja siempre es siempre más floja, el cierre de este periodo ha supuesto una pérdida de un 20% de los ingresos. Desde Vilanova Park reconocen que “hay un cierto nivel de duda” sobre lo que puede suceder. Todos, por eso, están haciendo un esfuerzo con la voluntad de que abran las fronteras, poder ofrecer unas vacaciones seguras y “salvar la temporada”.