El secuestro y violación en grupo de una chica rusa de 25 años en Barcelona el pasado fin de semana, dada hoy a conocer, anota una más en la triste lista de manadas o agresiones sexuales múltiples que se han registrado desde principios de año en Cataluña. Y no son pocas: hasta ahora, siete.
El ataque sexual en un campamento de personas de origen rumano en Poblenou, asentamientos que, por cierto, el Ayuntamiento de Barcelona conoce desde 2016 y no ha atinado a desalojar ofreciendo alternativas a sus ocupantes, se produjo el mismo fin de semana en el que un grupo de cuatro jóvenes se cebó con una menor de 17 años en una casa abandonada y okupada en el barrio de Les Escodines de Manresa. Los jóvenes de entre 18 y 25 años han ingresado en prisión preventiva. La víctima reconoció a tres de ellos en rueda de reconocimiento ayer viernes, ha avanzado Regió 7.
Sin solución de continuidad
La autonomía catalana suma de hecho un goteo de casos de violaciones múltiples. Es la tercera región con más casos de este tipo, con 22 episodios desde 2016, por detrás de Andalucía (27) y la Comunidad Valenciana (24). Hay más cifras preocupantes. Los Mossos d'Esquadra establecen en 833 las denuncias por agresiones sexuales en 2018, un repunte del 10%. Descarta la policía autonómica un incremento de casos y lo achaca a una "mayor sensibilización".
Otras fuentes como el Hospital Clínic Barcelona son menos optimistas. La ciudad sanitaria atendió 448 casos de este tipo el ejercicio precedente. Ello supone un fuerte incremento respecto a los 170 ingresos contabilizados doces meses atrás.
Siete manadas
Este año los casos de violación múltiple, cierto, copan las portadas, al calor de la condena e ingreso en prisión de la primera de las manadas: la de Pamplona por San Fermín en 2016. En febrero se produjeron dos casos en Berga y Sabadell, ambas en Barcelona. Una menor denunció el día 20 de aquel mes que había agredida por dos hombres en la antigua discoteca Menfis de Berga. El hospital donde fue atendida avisó a los Mossos d'Esquadra, que arrestaron a dos hombres. El mismo mes, cinco hombres arremetieron contra una chica de 18 años en una fábrica abandonada en Sabadell. Uno de ellos ha huido de la justicia.
El 19 de marzo hubo el mayor capítulo de agresión sexual múltiple en Tarragona, aunque solo uno de los participantes está imputado por violación. El resto, diez chicos, algunos menores, se enfrentan a cargos de abusos sexuales. Ocurrió algo parecido en Canet de Mar el 29 de junio con menores extranjeros no acompañados (MENA). Grabaron su agresión con el móvil. Dos de ellos están ingresados en régimen cerrado. El 4 de julio la Guardia Urbana detuvo a dos turistas suizos de 22 años en Barcelona por violar a una joven belga en la playa del Somorrostro. Tras ellos llegó el caso de Manresa, localidad donde ya se produjo otro ataque sexual grupal en 2016 por parte de siete jóvenes. Los está juzgando la Audiencia Provincial de Barcelona.