Ada Colau revisará la chapuza policial y municipal perpetrada en torno al caso del violador de Drassanes. La alcaldesa de Barcelona se ha visto obligada a pedir un informe al comisionado de Seguridad, Amadeu Recasens, ante las denuncias de descoordinación entre cuerpos de seguridad y pasividad institucional que denunció CSIF y que afloró este medio.
La munícipe ha anunciado hoy que pedirá un documento que detalle las actuaciones a Recasens. El dosier deberá reseñar las "actuaciones previas del detenido por la agresión física y sexual de una mujer en la avenida Drassanes de Barcelona el viernes". El mismo documento tendrá que incluir la actuación de los distintos cuerpos y fuerzas de seguridad --incluida la Guardia Urbana, que detuvo a Pascal, presunto agresor, y los Mossos d'Esquadra--. Ha admitido la primera edil y candidata de Barcelona en Comú (BComú) a la reelección que la Urbana había intervenido en denuncias previas a los días del salvaje ataque, que acabó con la oreja de la víctima seccionada. "Habían llegado a llevarlo a psiquiatría por si había algún problema con él", ha reconocido la alcaldesa.
CSIF denuncia inoperancia institucional
Las palabras de Ada Colau llegan después de que el sindicato CSIF denunciara descoordinación policial a la hora de localizar y detener a Pascal. Según la agrupación mayoritaria en la Guardia Urbana, el cuerpo lo había detectado el pasado 13 de abril, cuando quemó un colchón en una papelera del barrio del Raval de la Ciudad Condal. "En una de las intervenciones anteriores, se le intervino un cuchillo de grandes dimensiones", explicó CSIF. No obstante, el personal de psiquiatría de un hospital local decidió no ingresarlo y evaluación y "lo dejaron en la calle".
Pascal, presunto 'violador de Drassanes', captado por los vecinos de Barcelona días antes del supuesto ataque / CG
"Se tenían que haber volcado los servicios sociales y otros organismos para evitar lo que a la postre sucedió: la salvaje agresión de este hombre contra una mujer", denunció ayer Eugenio Zambrano, secretario de Administración Pública del sindicato. "No será porque Guardia Urbana lo no advirtiera e hiciera lo que tenía que hacer. Doblemente, sentimos esa frustración a nivel profesional ante los organismos que no actúan, y la frustración como ciudadanos, ya que hay un problema grave en la calle que puede empeorar, como tristemente ha pasado".
Los vecinos también denunciaron
La reacción de la alcaldesa de Barcelona llega también después de que la asociación de vecinos RPR, situada en el barrio del Raval, criticara el lunes que el individuo detenido por ser, presuntamente, el violador de Drassanes, "era un peligro" desde hacía días. Añadieron los residentes que "diversas autoridades han tenido conocimiento de ello" y no actuaron.
A este respecto, los vecinos subrayan un doble incidente provocado presuntamente por Pascal, que arrancó cableado de la calle el pasado 12 de abril antes de increpar a los residentes. Hizo lo propio el sábado, 13 de abril, hasta que tuvieron que acudir vecinos a sofocar un pequeño incendio. El segundo suceso acabó con el atacante detenido. "La violación de la joven ya había ocurrido pese a todas las advertencias que dimos desde la AAVV, de su comportamiento violento y antisocial", remacharon.