La agresión sexual perpetrada ayer a una mujer por, presuntamente, 15 jóvenes en Santa Coloma de Gramenet, pone en relieve la actuación del Govern ante los mena, menores no acompañados. Algunos de los detenidos son jóvenes y menores no acompañados sin residencia fija y que ocupan viviendas deshabitadas y en mal estado por falta de mantenimiento. Chakir el Homrani consejero de Trabajo, Asuntos Sociales y Familias de la Generalitat ha admitido esta mañana en RAC1 que la acogida de menores "está tensionada" en la región. Ha agregado el republicano que el suceso se trata de un asunto judicial y que, por lo tanto, el Govern tiene que esperar a la resolución judicial para actuar. Las palabras del titular de Trabajo llegan después de que el consistorio de la localidad haya pedido ayuda para “abordar, de una manera global y como problema de país, la presencia de estos jóvenes y menores no acompañados que circulan por la geografía catalana sin residencia fija”.
El conseller ha subrayado que la acogida a menores "no es un sistema de bienestar" y que el Ejecutivo autonómico no tiene potestad para tratar de forma íntegra a los jóvenes. Antes, sin embargo, el ayuntamiento de la localidad afectada por los hechos de La Manada de Santa Coloma pide “soluciones urgentes” ya que “no puede ser abordado, localmente, sin el apoyo del gobierno de la Generalitat de Cataluña”. Entre las medidas que propone el equipo de gobierno de Santa Coloma figura una mayor presencia de Mossos d’Esquadra en la localidad.
Los 'mena'
El también diputado independentista ha hecho hincapié que de los 15 agresores, solo dos eran menores. Cualquiera que fuere la situación, el representante del Govern ha dejado entrever el desborde y la situación de tensión que vive la administración ante este problema. Homrani ha reconocido que la Generalitat gestiona la situación de 2.500 menores en el sistema de protección. Según el Ejecutivo, otros 3.000 adolescentes sin hogar fijo llegaron a Cataluña en octubre. El conseller ha reconocido en la entrevista que las cifras de llegada son muy elevadas y que algunos salen del sistema por movilidad o porque se hacen adultos.
Estación de Can Peixauet de la Línea 9 Norte, donde ocurrió la agresión sexual / Trenscat
La argumentación del consejero contestaba al equipo de Núria Parlón, que ha precisado que el grupo presuntamente atacante lo conforman “jóvenes sin residencia fija y que ocupan viviendas deshabitadas y en estado ruinoso por falta de mantenimiento”. La Policía Local de la localidad consiguió detener a los presuntos agresores. Éstos vivían en una casa okupada y dejaron trazas de sarna en las dependencias y vehículos policiales al ser arrestados.
El 'Govern' pasa la pelota al ayuntamiento
El conseller ha declarado en la entrevista que el Ayuntamiento no les notificó que hubiera menores en situación de vulnerabilidad ocupando un edificio. Además, ha afirmado que cuando se notifican estas situaciones se responde “al momento” pero que el protocolo indica que tiene que avisar primero la administración local. Homrani ha explicado que están a la espera de que los Mossos d’Esquadra les confirmen si los menores estaban tutelados o no por la Generalitat. "Cuando la cuestión de un delito, y de lo que estamos hablando es un delito muy grave, aquí quien tiene que actuar es la justicia", ha indicado en referencia a la actuación de la Dirección General de la Infancia y la Adolescencia (Dgaia).
No ha perdido la oportunidad para subrayar que hay casos en que los jóvenes se escapan de los centros. A este respecto, ha pedido ser muy "estrictos y cuidadosos" a la hora de abordar estos temas y así evitar estigmatizar a los menores. Homrani ha explicado que, en ocasiones, se les atribuye delitos que no han cometido.
Agresión y navajazo
La agresión sexual ocurrió, según las primeras informaciones, el domingo a las 6:00 horas de la madrugada en el apeadero de la Línea 9 Norte del Metro de Barcelona. El grupo de 15 atacantes se habría abalanzado sobre la chica dentro del vagón, donde comenzaron los tocamientos. El ataque continuó en el trayecto que une los andenes con los ascensores de la Estación de Can Peixauet que conducen hasta la biblioteca municipal en la superficie.
La joven consiguió sacar el móvil y llamar a su pareja, que acudió a socorrerla. Al llegar al lugar de los hechos se produjo una pelea en la que el vecino resultó apuñalado. La Policía Local de Santa Coloma consiguió más tarde detener a los presuntos atacantes.