Una prostituta ofrece sus servicios en una calle de Barcelona / CG

Una prostituta ofrece sus servicios en una calle de Barcelona / CG

Vida

Barcelona rechaza prohibir la prostitución y multar a los clientes

El pleno municipal 'tumba' una proposición del PSC que subrayaba los elevados números de trata de blancas y explotación sexual

29 junio, 2018 12:25

Barcelona ha rechazado hoy viernes, 29 de junio, aprobar una ordenanza contra la prostitución y la explotación sexual en la ciudad. La mayoría del pleno municipal ha votado en contra de la propuesta del PSC de apoyo y asistencia a las trabajadoras sexuales y de castigo a clientes y proxenetas.

El líder del PSC en el Ayuntamiento de Barcelona, Jaume Collboni, ha defendido que la "prostitución es esclavitud", ha recordado las elevadas cifras de trata de blancas y de explotación infantil, que alcanzarían al "95% de las mujeres". Collboni ha citado también los ejemplos de Alemania y Holanda, donde la legalización del trabajo sexual "ha aumentado la demanda" y lo ha contrapuesto al modelo de Suecia, donde este fenómeno se ha prohibido y ya se castiga a los clientes. Ha tenido palabras también para los argumentos de Amnistía Internacional y otras oenegé, pero su alocución, no obstante, no han convencido a la mayoría de grupos municipales.

'Orgullo puta'

Barcelona en comú (BComú) y la CUP han hilvanado discursos casi calcados contra la proposición del PSC. Han lamentado que se "infantilice" a las mujeres que ejercen la prostitución y han instado a separar "trabajo sexual voluntario y trata de blancas". Asimismo, han cargado contra las ordenanzas de civismo y convivencia aprobadas en distintos ayuntamientos, incluido el de Barcelona dos legislaturas atrás. "Han tenido un resultado desastroso", ha valorado Laura Pérez, concejal de Feminismos y LGTBI de Barcelona.

Defensoras de los derechos laborales de las prostitutas en el pleno de Barcelona donde la alcaldesa Ada Colau rechazó una resolución del PSC favorable a prohibir esta actividad / CG

Defensoras de los derechos laborales de las prostitutas en el pleno de Barcelona donde la alcaldesa Ada Colau rechazó una resolución del PSC favorable a prohibir esta actividad / CG

Prostitutas y activistas pro regulación, en el pleno de Barcelona hoy / CG

En un acalorado debate, con presencia de un colectivo de trabajadoras sexuales que portaban una pancarta con el lema Orgullo Puta, los grupos mayoritarios han intercambiado argumentos mientras el grupo de prostitutas y activistas pro regulación del trabajo sexual les abucheaban o jaleaban. Desde el PDeCAT han defendido ser "abolicionistas" y han recordado la ligazón entre la oferta sexual y explotación infantil. La nueva Convergencia también ha puesto a Suecia como ejemplo a seguir. Por contra, Marilén Barceló, de Ciudadanos, ha pedido "dar cobertura al trabajo sexual voluntario" y no "mezclar cosas". Se ha significado, también, contra la trata de blancas, pero a favor de legislar la prostitución voluntaria.

El PP trata de enmendar

Por su parte, una representante de ERC ha desgranado peticiones similares: dar cobertura laboral y de Seguridad Social a las prostitutas y reforzar los programas municipales que apoyan a las mujeres. "Hay que invertir más fondos en los servicios que ayudan a las chicas a dejarlo así como también a los que dan un servicio a las que ejercen el trabajo sexual", ha indicado. La posición de los republicanos es diametralmente opuesta a la del PP, que intentó introducir una enmienda a la propuesta del PSC para focalizarse en la prostitución en la calle. "Donde hay este fenómeno se crean problemas de convivencia", ha señalado el concejal Alberto Villagrasa. El edil ha agregado que una nueva ordenanza "no tendría efecto hasta el próximo mandato", por lo que ha abogado por poner "más medios humanos y materiales para combatir la trata y explotación".

Cabe recordar que el PSC proponía crear, precisamente, impulsar una ordenanza contra la prostitución y explotación sexual en Barcelona. Los ejes de dicha norma, que no ha prosperado, serían la "asistencia a las mujeres", "dar alternativas para salir del trabajo sexual" y e"liminar las sanciones". Asimismo, el grupo que preside Jaume Collboni abogaba por "luchar contra proxenetas, clientes y personas que se benefician", ya sea con multas y medidas preventivas. Los socialistas querían también "más prevención y sensibilización" y la "prohibición de la publicidad que tratara el cuerpo de la mujer como objeto sexual" en el espacio público.