Francia investiga sólo a uno de los tres detenidos por el ataque yihadista en Cataluña
Los fiscales tienen pruebas consistentes que podrían dar lugar a un procesamiento, mientras los otros dos arrestados quedarán en libertad
23 febrero, 2018 19:10
Francia abrirá una investigación formal contra uno de los tres detenidos el pasado 20 de febrero como sospechoso de tener algún tipo de vínculo con las masacres terroristas que mancharon de sangre Barcelona y Cambrils (Tarragona) los pasados días 17 y 18 de agosto. Los otros dos arrestados quedarán en libertad.
El hombre que ha quedado bajo custodia policial nació en 1986 y será interrogado por un magistrado para ser formalmente investigado, lo que significa, según la ley francesa, que los fiscales creen que tienen pruebas serias o consistentes que podrían dar lugar a un procesamiento.
Análisis de armas
Fuentes de la lucha antiterrorista informaron este jueves que la investigación policial se centraba en el análisis de unas armas halladas en los registros practicados en la detención del martes, 20 de febrero, en los departamentos occitanos de Gard y Tarn.
Los arrestados, de acuerdo a las citadas fuentes, eran dos marroquíes de 31 y 32 años y un tercer varón francés de 31 años. Se les acusaba por la conexión con Driss Oukabir, que fue arrestado tras el atentado de agosto en Cataluña y que se encuentra aún en prisión.
Colaboración entre países
Los servicios policiales franceses, en colaboración con el Servicio de Información de la Guardia Civil y la Comisaría General de Información de los Mossos d'Esquadra, procedieron el martes al arresto de estas tres personas por los contactos con miembros de la célula yihadista que atentó el 17 de agosto en La Rambla de Barcelona y horas después en Cambrils (Tarragona).
Acto de homenaje a las víctimas de los atentados de Barcelona
Según informó el Ministerio del Interior, los investigadores esperaban que de esta nueva actuación, y de los datos obtenidos en los registros, se pudieran incorporar "hechos relevantes sobre la relación y posible conexión de los detenidos con los terroristas".
El misterioso viaje a París
Tras los atentados de Barcelona y Cambrils hace seis meses, una de las principales líneas de investigación que se abrió, y que aún permanece activa, fue la de averiguar posibles conexiones de los miembros de la célula terrorista con terceras personas que residieran fuera de España.
Se investiga, por ejemplo, el viaje que varios de los integrantes realizaron a París, donde tomaron imágenes de la Torre Eiffel. También se han practicado diligencias policiales para recabar pruebas sobre posibles conexiones en otros países, principalmente en Marruecos (donde se practicaron otras detenciones) y Bélgica.
Otras detenciones
Las detenciones en Francia se llevaron en cabo por el Equipo Conjunto de Investigación constituido por autoridades de Francia y España en virtud del protocolo firmado el pasado octubre para auxiliar la investigación que dirige el Juzgado Central de Instrucción número 4 de la Audiencia Nacional y coordina la Fiscalía.
La Guardia Civil desarrolló otra operación el 22 de septiembre en la que se detuvo en Vinaròs (Castellón) a un marroquí residente en España de 24 años por su "estrecha relación" con varios de los terroristas, especialmente con Abdelbaki Es Satty, el imán de Ripoll considerado cerebro de la célula yihadista.
Cuchillos y un hacha
Los investigadores acusaron al detenido de dar apoyo para la adquisición de las sustancias que permitieron la fabricación del explosivo TATP.
En el auto de prisión de Driss Oukabir, hermano de uno de los abatidos por los agentes de los Mossos en Cambrils, el juez Andreu detallaba que los terroristas que actuaron en esta localidad de Tarragona usaron armas, concretamente cuchillos y un hacha, así como cinturones explosivos que luego se demostraron falsos.
La casa de Alcanar
Estos cinturones también aparecieron en la casa de Alcanar (Tarragona) que utilizaban como laboratorio para fabricar explosivos.
Younes Abouyaaqoub, el huido tras irrumpir en La Rambla con una furgoneta blanca arrollando a decenas de personas, también llevaba uno de estos cinturones explosivos falsos y tres armas blancas cuando fue abatido por los agentes de los Mossos d'Esquadra el 21 de agosto, tras ser sorprendido en un viñedo de Subirats (Barcelona).