Bronca pública a un alcalde de ERC por un dispensario de metadona

Bronca pública a un alcalde de ERC por disfrazar la apertura de un dispensario de metadona. Jaume Oliveras (ERC), primer edil de El Masnou (Barcelona), recibió un correctivo el miércoles por la noche durante una reunión para explicar el nuevo servicio, que parte de los vecinos quiere trasladar.

El munícipe tuvo que acortar una audiencia pública celebrada junto al CAP Ocata, donde abrirá en breve la unidad médica de adicciones. Antes, durante el acto, Oliveras vio como vecinos y comerciantes le afeaban que no hubiera informado sobre el nuevo servicio, que compartirá la segunda planta del ambulatorio con la psiquiatría pediátrica. También rebatieron algunas inexactitudes de la versión municipal, algunas de las cuales avanzó este medio.

Sin consenso

Uno de los puntos que acabó admitiendo el primer edil es que el servicio operará dos días a la semana y no quincenalmente, algo de detalló Crónica Global y Oliveras tachó de "información alarmista". Asimismo, el electo independentista reconoció que el proyecto, que es de hecho una ampliación de la cartera de salud mental en el CAP Ocata, no ha sido pactado con el gestor tradicional de este servicio en la zona: Comunitats Terapèutiques del Maresme.

En su defecto, será el Consorci Sanitari del Maresme (CSM) quien se encargará de montar y gestionar la unidad, para la que el centro de salud tiene una lista de potenciales pacientes de veinte personas. Lo hará a petición del Servicio Catalán de Sanidad (CatSalut), que reparte el aumento presupuestario de la Consejería en salud mental "sin ton ni son, como demuestra el hecho de que no contó con Comunitats Terapèutiques para diseñar el servicio", según las fuentes consultadas.

'Pediatría sí, metadona no'

Precisamente, la racionalidad en el gasto en salud será uno de los ejes de la protesta que tendrá lugar mañana sábado, 24 de febrero, en la plaza Països Catalans de El Masnou. La plataforma Pediatría sí, metadona no reclamará sustituir la nueva área asistencial por una unidad de medicina infantil, inexistente en la zona de Ocata y sólo en oferta en la cartera de servicios de salud en el CAP El Masnou.

En paralelo, los vecinos partidarios de cambiar el dispensario de metadona de ubicación han iniciado dos recogidas de firmas, una on line que ya lleva más de 700 apoyos y otra física que presentarán en breve. Su argumento principal es que la unidad médica de drogodependencias es necesaria, pero la ubicación, junto a una guardería, un colegio de primaria y compartiendo espacio con la psiquiatría para menores, es errónea.